MADRID 20 Nov. (EUROPA PRESS) -
El telescopio espacial Planck de la Agencia Espacial Europea (ESA) ha descubierto un puente de gas caliente entre dos cúmulos de galaxias a través de 10 millones de años luz en el espacio.
La tarea fundamental de Planck es capturar la luz más antigua del cosmos, el Fondo Cósmico de Microondas (CMB). Este tipo de luz tenue atraviesa el Universo y se encuentra con distintos tipos de estructura, incluyendo las galaxias y cúmulos de galaxias (asambleas de cientos de miles de galaxias unidas por la gravedad).
Si la luz del CMB interactúa con el gas caliente que impregna estas estructuras cósmicas enormes, se modifica de una forma característica, dando lugar al fenómeno conocido como el Sunyaev-Zel'dovich (SZ), en honor a los científicos que lo descubrieron. Este efecto ha sido utilizado ya por Planck para detectar cúmulos de galaxias y también como método para detectar filamentos tenues de gas que puede conectar un grupo a otro.
Según han señalado los expertos, en el Universo temprano, filamentos de materia gaseosa invadieron el cosmos en una red gigante. Gran parte de este gas podría encontrarse ahora entre los cúmulos de galaxias, donde los filamentos se comprimen y se calientan, haciendo que sean más fáciles de detectar.
Así, el descubrimiento de Planck de un puente de gas caliente conectando los clusters Abell 399 y Abell 401, cada uno con cientos de galaxias, representa una oportunidad de estudiar este fenómeno.
Según ha explicado la ESA, la presencia de gas caliente entre los grupos de galaxias, a los que separan 10 millones de años luz, se insinuó por primera vez con el telescipio de rayos X XMM-Newton, y ahora los nuevos datos confirman la observación.
Gracias a los datos de ambas observaciones, se conoce que la temperatura del puente de gas es similar en todo su recorrido, del orden de 80 millones de grados centígrados. Además, un análisis preliminar determina que el gas podría ser una mezcla de los filamentos elusivos de la red cósmica, que se mezcla con el gas proveniente de los grupos.
Para la ESA, este hallazgo pone de manifiesto la capacidad de Planck para investigar los cúmulos de galaxias, sus alrededores y más allá, examinando su relación con el gas que se respira en todo el Universo y de la que forman todos los grupos de galaxias.