Descubren el 'Santo Grial' del cambio climático

CAMBIO CLIMÁTICO
NCAR
Actualizado: lunes, 18 mayo 2009 15:57

MADRID 18 May. (EUROPA PRESS) -

Científicos de la Universidad de San Diego (Estados Unidos) han descubierto el 'Santo Grial' del cambio climático, partículas biológicas que alteran la formación de las nubes y la conformación de hielo en las mismas, la evidencia "más directa" de la existencia de este fenómeno en la Tierra, según los expertos.

"Si entendemos la fuente de estas partículas en la formación de las nubes, así como su abundancia, podremos determinar el impacto de éstas en el clima", explicó el director del proyecto, Kerry Pratt. Así, los expertos tomaron muestras de gotas de agua y de residuos cristalinos en el cielo desde un avión en 2007.

Concretamente, estos se componían de partículas biológicas como bacterias, esporas de hongos y plantas. Según los expertos, este estudio demuestra 'in situ' y por primera vez la directa implicación de estas partículas en el proceso de formación de 'nubes de hielo' en la atmósfera, según recoge el portal 'Science Daily'.

Los efectos de éstas, que son transportadas por el aire, en la formación de las nubes, ha supuesto uno de los aspectos más difíciles para el estudio del clima. En el campo del cambio climático, la actividad de estas partículas en las nubes representa lo que los científicos consideran la mayor incertidumbre para la predicción de futuros modelos en el cambio climático.

En este sentido, proceden del polvo atmosférico, del hollín, de la sal del mar, además de materiales orgánicos, que viajan en el aire durante largas distancias por las nubes. Alrededor de estos núcleos, el agua y el hielo en la atmósfera se condensan y precipitan. Los científicos están intentando entender cómo la formación de nubes desempeña un papel crítico tanto en el enfriamiento de la atmósfera como en los procesos de precipitación.

Los resultados demuestran que las partículas biológicas que se transportan durante largas distancias en la atmósfera ayudan a inducir la formación de hielo en las nubes en función de su procedencia. Según el estudio, la evidencia inicial está sugiriendo cada vez más que el polvo transportado de Asia podría influenciar la precipitación en Norteamérica, por ejemplo.