MADRID 22 Jun. (EUROPA PRESS) -
Un equipo de científicos, entre ellos Jason Rhodes y Leonidas Moustakas de Jet Propulsion Laboratory, ha estudiado el cúmulo de galaxias Abell 2744, conocido como Grupo de Pandora. Se ha reconstruido la compleja y violenta historia de esta agrupación estelar mediante el uso de telescopios en el espacio y en superficie, incluyendo el Telescopio Espacial Hubble y el Very Large Telescope (VLT) del Observatorio Europeo Austral en Chile.
Abell 2744 parece ser el resultado de un choque en cadena simultáneo de al menos cuatro grupos de galaxias, y esta compleja colisión ha producido efectos extraños que nunca se había visto juntos antes.
Las galaxias en el cúmulo son claramente visibles en el Hubble y el VLT. A pesar de que las galaxias son brillantes, representan allí menos del 5 por ciento de la masa. El resto es una combinación de materia de gas, un 20 por ciento, que es tan caliente que sólo brilla en rayos X, y la oscuridad, alrededor del 75 por ciento, que es completamente invisible. Para entender lo que estaba pasando en la colisión, el equipo necesitaba trazar las posiciones de los tres tipos de materia en Abell 2744.
Parece que en la compleja colisión se ha separado parte del gas caliente y de la materia oscura, de modo que ahora se encuentran separadas una de otra y de las galaxias visibles. Una región contiene una gran cantidad de materia oscura, pero no las galaxias luminosas o el gas caliente. Un fantasmal grupo separado de gas ha sido expulsado, que precede en lugar de seguir a la materia oscura asociada. Este desconcierto puede sin embargo decir algo a los astrónomos sobre cómo se comporta la materia oscura y cómo interactúan los diferentes ingredientes del universo unos con otros.