MADRID 10 Oct. (EUROPA PRESS) -
Un equipo internacional del Observatorio de la Costa Azul de Niza (Francia) han obtenido nuevas teorías sobre la inclinación del eje de rotación de Urano, que contradicen las admitidas hasta ahora que hablaban de un gran impacto de un objeto con el planeta. Así, los nuevos estudios no hablan de uno, sino de dos impactos menores, que acabaron inclinando el eje en 98 grados respecto a su plano orbital alrededor del Sol.
La posición de Urano es una de sus características más estudiadas por los expertos, ya que es mucho más pronunciada que en otros planetas, como Júpiter, que está inclinado 3 grados, la Tierra (23 grados), o Saturno y Neptuno (29 grados). Concretamente, los expertos hablan de que Urano "gira sobre su lado".
Hasta ahora, la teoría generalmente aceptada es que en el pasado un cuerpo, dos veces más masivo que la Tierra, colisionó con Urano golpeándolo por uno de sus lados. A pesar de que esta teoría ha sido aceptada durante años, los científicos han señalado que existe una "grieta" importante en ella: las lunas de Urano y sus anillos también están inclinados.
Ante esta situación, el equipo del Observatorio de la Costa Azul de Niza utilizaron simulaciones para reproducir diversos escenarios de impacto a fin de determinar la causa más probable de la inclinación de Urano. Durante el trabajo, que ha sido presentado en el Congreso Europeo de Ciencia Planetaria 2011, han barajado la posibilidad de que los impactos se hubieran producido cuando el planeta estaba en formación y rodeado por discos de restos de material que estaba en el proceso de formación de sus lunas.
Así, la teoría señala que tras la colisión, Urano se habría girado "un poco" levantando una nube de escombros que formó "una especie de cinturón de grasa alrededor del planeta". Posteriormente, la segunda colisión completaría la tarea, dando el impulso suficiente para que el disco de escombros llegara a las lunas, variando también su posición.
Esta teoría explica también, según han señalado los científicos, el "extraño" campo magnético de Urano, que no es alineado con el eje de rotación, e incluso está fuera del centro del núcleo del planeta. En este sentido, apuntan que "no está claro" este punto, aunque "podría tener que ver con su posición", además de su composición.
La posición de Urano le lleva a tener uno de sus polos de cara al Sol. Si el hombre habitara el planeta su vida tendría que sufrir 42 años seguidos de día y 42 de noche.