MADRID 23 Nov. (EUROPA PRESS) -
Astrónomos que operan el telescopio espacial Spitzer de la NASA han encontrado una impresionante explosión de formación estelar que emite tanta luz infrarroja como una galaxia entera. La colisión de dos galaxias espirales ha provocado esta explosión, que está envuelta por el polvo que hace que sus estrellas resulten casi invisibles en otras longitudes de onda de la luz.
Este fenómeno estelar recién revelado por el Spitzer se erige como el más luminosO visto lejos de los centros de fusión de las galaxias precursoras. Refulge diez veces más brillante que el anterior estallido estelar más brillante conocido, la denominada Galaxia Antena.
Los nuevos hallazgos muestran que las fusiones de galaxias pueden desencadenarse alejadas de los centros galácticos respectivos, donde se acumula el polvo y gas que da lugar a la formación de estrellas, informa el JPL (Jet Propulsion Laboratory).
"Este descubrimiento demuestra que la fusión de galaxias puede generar destellos de gran alcance fuera de los centros de las galaxias padres", dice Hanae Inami, primer autor de un estudio que detalla los resultados en The Astronomical Journal. Inami, estudiante graduado en la Universidad de Postgrado para Estudios Avanzados en Japón y el Centro de Ciencia Spitzer en el Instituto de Tecnología de California, agrega: "La emisión de luz infrarroja de la erupción domina su galaxia anfitriona y rivaliza con el de las galaxias más luminosas que vemos que están relativamente cerca de nuestra casa, la Vía Láctea".
"No importa cómo se mire, este estallido estelar es uno de los objetos más luminosos del Universo local", concuerda Lee Armus, segundo autor del artículo y un astrónomo de la investigación de alto nivel también en el Centro de Ciencia Spitzer.
Inami, Armus y sus colegas detectaron el estallido estelar con Spitzer en el grupo de galaxias conocido como II Zw 096. Este choque de trenes galácticos - ubicado a unos 500 millones de años luz de distancia en la constelación de Delphinus (el Delfín) - continuará desarrollándose durante unos cientos de millones de años. Las fuerzas gravitatorias ya han disuelto la forma de molinete de una de las galaxias afectadas por el proceso.
El ultra-brillante estallido estelar abarca 700 años luz más o menos, sólo una pequeña porción de II Zw 096, que fluye a través de unos 50.000 a 60.000 años luz. Sin embargo, emite el 80 por ciento de la luz infrarroja de este tumulto galáctico.