MADRID, 10 Dic. (EUROPA PRESS) -
El quinto y último Vehículo Automatizado de Transferencia de la ESA probó una nueva tecnología antes de acoplarse con la Estación Espacial, que reveló el complejo orbital de una forma inédita.
El ATV Georges Lemaître puso a prueba un conjunto de sensores que ofrecerá futuras mejoras en el acoplamiento de naves similares. El objetivo de la ESA es lograr un encuentro automatizado más lejos de casa, quizás cerca de Marte o con un objetivo no cooperativo como un objeto inerte.
El carguero Georges Lemaître usó un sensor de imágenes láser por infrarrojos (LIRIS), que se encendió dos horas y media a 3.500 metros de la Estación Espacial. Todos los sensores funcionaron como se esperaba y una gran cantidad de datos fue grabada y almacenada en discos duros en la bodega del ATV.
Los discos fueron recuperados por el astronauta de la ESA Alexander Gerst el 29 de agosto y regresaron a la Tierra en la Soyuz TMA-12M en septiembre. La información está siendo ahora comparada con los resultados de los sensores normales de navegación de ATV.
PERMITE ATRAQUES EN LA OSCURIDAD
Con ATV-5 directamente apuntando a la estación, las cámaras infrarrojas LIRIS rastrearon el complejo orbital perfectamente a pesar de varios periodos de 30 minutos en oscuridad, cuando el Sol estaba eclipsado por la Tierra y las cámaras tradicionales habrían quedado a ciegas.
La imagen fue tomada a 70 m de la estación, primera que muestra el complejo en esta configuración. Para el atraque de un ATV, la estación gira sus paneles solares para evitar que las señales de navegación GPS reboten en la estructura y confundan a la nave entrante.
Cuatro días antes del acoplamiento, ATV voló 7 kilometros por debajo de la estación para comprobar la capacidad de largo alcance de las cámaras de infrarrojos. Un primer vistazo a las lecturas confirma la capacidad de LIRIS para seguir blancos desde la distancia, informa la ESA.
LIRIS incluye un lidar -como un radar pero que usa luz- que emite pulsos de rayos láser sobre un espejo para recoger datos en 3D en alta resolución. El lidar registra la cantidad de luz reflejada, lo que puede proporcionar pistas sobre el tipo de material que está escaneando.
La ventaja de esta técnica es que analiza los objetos y recopila información acerca de ellos sin un enlace de comunicaciones dedicado o hardware instalado en los objetivos. Los sensores pueden rastrear objetivos igual de bien en la oscuridad y proporcionar mapas detallados en 3D de un objeto.
@CIENCIAPLUS