MADRID, 12 Feb. (EUROPA PRESS) -
El cohete Falcon 9 de Space X regresó a la Tierra después de un exitoso lanzamiento de la misión DSCVR al espacio profundo, aterrizando en el mar a 10 metros de su objetivo real.
Aunque no hizo blanco en la plataforma marina como se había pensado originalmente, la compañía espacial privada cree que sin el mal tiempo que se daba en el momento del retorno en la zona, el cohete habría aterrizado como estaba previsto.
"El cohete aterrizó suavemente sobre el océano a sólo 10 metros de la meta y con buena verticalidad," tuiteó el presidente de SpaceX, Elon Musk. "Alta probabilidad de buen aterrizaje en la plataforma con tiempo no tormentoso" Más tarde, Musk publicó una foto del cohete bajando con la frase "aterrizaje en un mar tormentoso."
El cohete fue lanzado desde Cabo Cañaveral en Florida a las 0.05 horas de este jueves, hora de de Madrid, transportando un satélite que recogerá datos sobre la atmósfera de la Tierra, así como otra información relacionada con el clima espacial.
Tras un primer fracaso en el retorno del cohete en enero, cuando otro cohete Falcon 9 se estrelló al aterrizar desnivelado sobre la plataforma; en este caso el lanzador ha logrado regresar a superficie en verticalidad, fundamental para un aterrizaje seguro. Pero el tiempo no ha acompañado. "El barco drone fue diseñado para operar en todo menos en el clima más extremo," escribió SpaceX en su sitio web.
Olas de tres metros de altura en la zona del Atlántico donde estaba desplegada la plataforma, alteraron su posición de forma que el cohete no logró alcanzar su superficie y aterrizó suavemente en el agua.
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