JÉRÔME THOMAS (UMR CNRS 6282 BIOGEOSCIENCES, UNIV
MADRID, 8 May. (EUROPA PRESS) -
Un nuevo estudio sugiere que, hace 6.000 años, personas de toda Europa compartían la tradición cultural de utilizar cáscaras de mejillón de agua dulce para elaborar adornos.
Un equipo internacional de investigadores, incluidos académicos de la Universidad de York, extrajo proteínas antiguas de los ornamentos de conchas prehistóricas, que parecen muy similares a pesar de encontrarse en lugares distantes de Dinamarca, Rumania y Alemania, y descubrieron que todos se hicieron con la madreperla de mejillones de agua dulce.
Los adornos se hicieron hace entre 4.200 y 3.800 años antes de nuestra era, e incluso se encontraron en áreas de la costa donde habría muchas otras cáscaras disponibles.
La evidencia arqueológica sugiere que los adornos, conocidos como "botones dobles", pueden haber sido insertados en el cuero para decorar brazaletes o cinturones.
La autora principal del estudio, Beatrice Demarchi, del Departamento de Arqueología de la Universidad de York y de la Universidad de Turín (Italia), dijo: "Nos sorprendió descubrir que los adornos estaban hechos de mejillones de agua dulce porque eso implica que este material fue muy apreciado por los artesanos prehistóricos, dondequiera que estuvieran en Europa y al grupo cultural al que pertenecieran. Nuestro estudio sugiere la existencia de una tradición intercultural a nivel europeo para la fabricación de estos botones dobles".
Los moluscos de agua dulce a menudo se han pasado por alto como fuente de materia prima en la prehistoria (a pesar de la fuerza y la resistencia de la madreperla) porque muchos arqueólogos creían que su origen local los hacía menos "prestigiosos" que las conchas marinas exóticas.
El coautor del artículo André Colonese, del Departamento de Arqueología de la Universidad de York, dijo: "Los adornos están asociados con el Mesolítico Tardío, el Neolítico Tardío y las culturas de la Edad de Cobre. Algunos de estos grupos todavía vivían como cazadores recolectores, pero en el sur eran agricultores con el cambio a un estilo de vida más sedentario.
"El hecho de que estos adornos se vean consistentemente similares y estén hechos del mismo material sugiere que puede haber habido algún tipo de interacción entre estos distintos grupos de personas en este momento.
"Es posible que hayan tenido un conocimiento o una tradición compartida sobre cómo fabricar estos adornos y claramente tenían una comprensión sofisticada del entorno natural y qué recursos utilizar".
Las conchas de moluscos contienen una proporción muy pequeña de proteínas en comparación con otros tejidos bio-mineralizados, como el hueso, lo que dificulta su análisis.
Los investigadores ahora están trabajando en la extracción de proteínas de moluscos fosilizados, un método que han apodado "paleocascarómica". Estas nuevas técnicas podrían ofrecer nuevos conocimientos sobre algunas de las formas de vida más antiguas en la tierra, mejorando nuestro conocimiento de la evolución.
Demarchi agregó en un comunicado: "Esta es la primera vez que los investigadores pueden recuperar antiguas secuencias de proteínas de los ornamentos prehistóricos de la concha para identificar el tipo de molusco del que están hechos.
"Esta investigación es un paso importante para comprender cómo evolucionaron los moluscos y otros invertebrados. Esperamos que al usar estas técnicas podamos seguir un proceso evolutivo que comenzó hace al menos 550 millones de años".