Madera bajo el microscopio sirvió para datar el asentamiento vikingo en Terranova - UNIVERSIDAD DE GRONINGA
MADRID, 20 Oct. (EUROPA PRESS) -
Un equipo de científicos ha obtenido pruebas de que los vikingos originales del norte de Europa ya estaban activos en el continente americano en el año 1021, según publican en la revista 'Nature'.
Los vikingos recorrieron grandes distancias en sus emblemáticos barcos ya que, hacia el oeste, establecieron asentamientos en Islandia, Groenlandia y, finalmente, una base en L'Anse aux Meadows (Terranova, Canadá), pero no estaba claro cuándo tuvo lugar esta primera actividad transatlántica.
En este caso, los científicos acaban de demostrar que los europeos estaban presentes en el continente americano en el año 1021 d.C., es decir, hace exactamente 1.000 años. Esta fecha también marca el momento más temprano conocido en el que se cruzó el Atlántico y la migración de la humanidad rodeó finalmente todo el planeta.
En este estudio, el corte de madera realizado por los vikingos en L'Anse aux Meadows se fechó exactamente en el año 1021 d.C. Los tres trozos de madera estudiados, procedentes de tres árboles diferentes, procedían de contextos arqueológicamente atribuibles a los vikingos.
Además, cada una de ellas presentaba claras evidencias de corte y rebanado con cuchillas de metal, un material que no producía la población indígena. El año exacto se pudo determinar porque en el año 992 d.C. se produjo una enorme tormenta solar que produjo una clara señal de radiocarbono en los anillos de los árboles del año siguiente.
"El aumento de la producción de radiocarbono que se produjo entre 992 y 993 d.C. se ha detectado en los archivos de anillos de árboles de todo el mundo", afirma en un comunicado el profesor asociado Michael Dee, de la Universidad de Groninga, en Países Bajos, y director de la investigación.
Cada uno de los tres objetos de madera presentaba esta señal 29 anillos de crecimiento (que indican los años) antes del borde de la corteza. "Encontrar la señal de la tormenta solar a 29 anillos de crecimiento de la corteza nos permitió concluir que la actividad de corte tuvo lugar en el año 1021 d.C.", explica la doctora Margot Kuitems, también de la Universidad de Groninga y primera autora del trabajo.
El número de expediciones vikingas a América y la duración de su estancia sobre el Atlántico siguen siendo desconocidos. Todos los datos actuales sugieren que la empresa fue de corta duración, y es probable que el legado cultural y ecológico de esta primera actividad europea en las Américas haya sido pequeño. No obstante, las pruebas botánicas de L'Anse aux Meadows han confirmado que los vikingos exploraron tierras más al sur de Terranova.
El año 1021 d.C. es el más antiguo en el que se puede demostrar científicamente la presencia europea en América. Las fechas anteriores de la presencia vikinga en América se han basado en gran medida en las sagas islandesas. Sin embargo, éstas comenzaron como historias orales y sólo se escribieron siglos después de los acontecimientos que describen.
Aunque contradictorias y a veces fantasiosas, las sagas también sugieren que se produjeron encuentros, tanto violentos como amistosos, entre los europeos y los indígenas de la región. Sin embargo, se han encontrado pocas pruebas arqueológicas que confirmen estos intercambios. También existen otros relatos medievales que dan a entender que figuras prominentes del continente europeo se enteraron de que los vikingos habían tocado tierra a través del Atlántico.