Recreación de Effigia - MARK WITTON
MADRID, 29 Nov. (EUROPA PRESS) -
Un herbívoro del Triásico, conocido por sus supuestas similitudes con un avestruz moderno, tiene un enfoque de alimentación completamente diferente al que se pensaba anteriormente.
Una investigación de la Universidad de Birmingham ha descubierto una diversidad mucho más amplia de comportamiento de los herbívoros durante el período Triásico de lo que se ha reconocido hasta la fecha.
Llamado Effigia, el animal tenía aproximadamente el tamaño de una gacela y vivió en América del Norte hace unos 205 millones de años. Sus restos fósiles se encontraron en la cantera Ghost Ranch en Nuevo México en la década de 1940, aunque los paleontólogos no describieron formalmente el material hasta 2006.
Los restos se habían conservado relativamente mal en la cantera y el cráneo, en particular, estaba bastante deformado, lo que dificultaba la reconstrucción precisa. Los primeros análisis del espécimen concluyeron que pertenecía al grupo de reptiles que incluye crocodilianos y aves y que comenzó a florecer en el período Triásico.
Aunque más estrechamente relacionado con los crocodilianos, el cuerpo liviano, el cuello alargado, los ojos grandes y el pico de Effigia compartían muchas similitudes con un avestruz moderno, lo que llevó a los investigadores a creer que el animal se alimentaba picoteando material vegetal del suelo.
Pero un nuevo análisis del espécimen, realizado por expertos de la Universidad de Birmingham, ha revelado que este animal era probablemente un tipo de herbívoro completamente diferente de lo que se pensaba anteriormente. El trabajo, realizado en colaboración con expertos de la Universidad de Bristol, el University College de Londres, la Universidad de York, Virginia Tech y el Natural History Museum, se publica en The Anatomical Record.
El equipo utilizó nuevas tomografías computarizadas del cráneo de Effigia que revelaron una reconstrucción mucho más precisa del animal. Esto incluyó nueva información sobre la forma del cráneo, como una cavidad cerebral más redondeada y bulbosa y mandíbulas superior e inferior curvadas. A diferencia del pico de avestruz, que es más redondeado, el pico de Effigia es más cóncavo con mandíbulas que se abren y cierran un poco como un par de tijeras.
El equipo utilizó esta información para modelar los efectos de diferentes fuerzas que actúan sobre el cráneo, incluido lo que sucede cuando el animal picotea el suelo. Al modelar las fuerzas que el cráneo necesitaría resistir para alimentarse picoteando, los investigadores calcularon que el cráneo de Effigia probablemente se habría roto. En cambio, sugieren, es más probable que el animal use sus mandíbulas para cortar y mordisquear trozos de material vegetal suave, como brotes jóvenes o helechos.
El investigador principal, el doctor Jordan Bestwick, dijo en un comunicado: "Los herbívoros que ya reconocemos en el período Triásico se alimentaban excavando en busca de raíces, como los aetosaurios parecidos a los cerdos, o buscando hojas en lo alto de las copas de los árboles, como los saurópodos de cuello largo. Estos navegadores de dos patas con una mordida débil son exclusivos de este período y muestran una diversidad previamente no reconocida entre los herbívoros de este período".