MADRID, 18 Jul. (EUROPA PRESS) -
Los estromatolitos, evidencia más antigua de organismos vivos sobre la Tierra, no se formaban sólo en agua salada, sino también en condiciones más parecidas a las aguas termales de Yellowstone.
Este descubrimiento es el resultado de tres años de trabajo de campo realizado en la región de Pilbara (Australia Occidental) por la profesora Tara Djokic, de la Universidad de Nueva Gales del Sur.
El hallazgo de Djokic retrocede en el tiempo la aparición de la vida microbiana en tierra firme en 580 millones de años (hasta los 3.500 millones de años) y también refuerza una hipótesis de cambio de paradigma establecida por los astrobiólogos David Deamer y Bruce Damer de UC Santa Cruz: que la vida comenzó, no en el mar, sino en tierra.
El descubrimiento de Djokic, junto con la investigación realizada por el equipo de UC Santa Cruz, Djokic y Martin Van Kranendonk, director del Centro Australiano de Astrobiología, se describe en Scientific American.
"Lo que ella (Djokic) mostró fue que la evidencia fósil más antigua para la vida estaba en agua dulce", dijo Deamer en un comunicado.
El modelo de vida que comienza en la tierra y no en el mar no sólo podría reestructurar nuestra idea sobre el origen de la vida y dónde podría estar, sino incluso cambiar la forma en que nos vemos a nosotros mismos, opina.