Muestreo de un denario republicano romano para análisis químico - UNIVERSIDAD DE LIVERPOOL
MADRID, 17 Oct. (EUROPA PRESS) -
Impurezas de oro en antiguas monedas de plata y contaminación por plomo en el hielo de Groenlandia han servido para demostrar que los romanos fueron los primeros pioneros del reciclaje.
Es la conclusión de una nueva investigación del Departamento de Arqueología, Clásicos y Egiptología de la Universidad de Liverpool, junto con el Departamento de Clásicos e Historia Antigua de la Universidad de Warwick.
La antigua extracción de plata de los minerales y su refinación en casas de moneda resultó en una gran contaminación por plomo. La contaminación antigua entró en la atmósfera, cruzó el Atlántico y dejó una huella de contaminación en el hielo de Groenlandia.
Sin embargo, esta investigación, publicada en la revista Archaeological and Anthropological Sciences, destaca que hubo una disminución dramática en los niveles de contaminación por plomo en el hielo durante la República Romana tardía, mientras se seguían producíendo monedas.
La investigación dice que durante los siglos I y II a.C., el acceso de Roma a las minas de plata en Iberia y el sur de Francia se vio interrumpido por conflictos. A menudo se considera que la degradación deliberada del denario (la moneda de plata predominante de los romanos) con cobre muestra interrupciones en la producción de plata. Sin embargo, a pesar de las ligeras caídas en la pureza de las monedas de plata (especialmente en la época de las Guerras Sociales y Civiles en el siglo I a. C.), esto no proporciona una explicación suficiente para las caídas en la contaminación por plomo.
Para explicar este fenómeno, los investigadores de Liverpool, el Dr. Jonathan Wood y el Dr. Matthew Ponting, señalan que los romanos reciclaban la plata, a menudo saqueada tras los conflictos en Iberia y el sur de Francia, para fabricar monedas.
Los investigadores analizaron la cantidad de otro elemento presente en la moneda: el oro, dado que toda la plata producida en la antigüedad contiene pequeñas cantidades de oro.
Alrededor del año 120 a. C. comenzaron a aparecer grupos de monedas con niveles muy bajos de oro. La plata utilizada para estas monedas también parece haber pasado a formar parte del suministro de plata para acuñar en la primera mitad del siglo I a.C. Luego, en el 49 a.C., parece entrar en circulación una nueva infusión de plata con altos niveles de oro. Dado que Julio César regresó a Roma de sus batallas con los galos en el 49 a. C., los investigadores proponen que esta nueva plata en circulación fue saqueada por el ejército de César.
El Dr. Jonathan Wood dijo en un comunicado: "Degradar la plata era una manera de lidiar con las fluctuaciones en el suministro de plata. Derretir la plata existente, ya sea la propia o la ajena, era otra. Para los romanos, reciclar monedas habría sido considerablemente menos costoso que extraer plata nueva: un beneficio para sus finanzas, así como para el medio ambiente".