MADRID, 10 Dic. (EUROPA PRESS) -
El puente de tierra firme que unió Asia con América durante la última edad de hielo era una ecosistema pantanoso atravesado por ríos serpenteantes.
Durante la última Edad de Hielo, las masas de tierra que conforman las actuales Siberia y Alaska estaban conectadas por una amplia franja de tierra, ahora sumergida en el océano. Durante décadas, los científicos han asumido que hace entre 36.000 y 11.000 años, el Puente Terrestre de Bering se parecía a Alaska y Siberia de la Edad de Hielo: una pradera esteparia árida.
Pero una nueva investigación basada en un trabajo de campo pionero en su tipo sugiere que es más probable que el Puente Terrestre de Bering fuera un ecosistema fluvial pantanoso.
"Estábamos buscando varios lagos grandes", dijo en un comunicado Sarah Fowell, paleogeóloga de la Universidad de Alaska Fairbanks. "Lo que en realidad encontramos fue evidencia de muchos lagos pequeños y canales fluviales".
Fowell y sus colegas presentaron su trabajo en la Reunión Anual de la AGU (American Geophysical Union).
Durante la última Edad de Hielo, los niveles globales del mar eran aproximadamente 122 metros más bajos que en la actualidad. Eso significa que gran parte de lo que ahora es el Mar de Bering era tierra, y que muchas especies podrían haber migrado libremente entre Alaska y Siberia.
Hasta ahora, los científicos han asumido que el Puente Terrestre de Bering era simplemente una extensión de los ecosistemas esteparios de la Edad de Hielo de Alaska y Siberia. Pero la región probablemente se parecía más al actual Delta del Yukón-Kuskokwim en el oeste de Alaska, un ecosistema fluvial pantanoso.
"Hemos estado buscando en tierra para intentar reconstruir lo que está bajo el agua", dijo Jenna Hill, geóloga del Servicio Geológico de Estados Unidos. "Pero eso no te dice realmente qué había en la tierra que ahora está sumergida entre Alaska y Siberia".
En el verano de 2023, Fowell, Hill y sus colegas partieron en el R/V Sikuliaq para sondear las profundidades del mar de Bering. Basaron su ruta en trabajos anteriores que habían cartografiado puntos bajos en el fondo marino, que pueden haber sido lagos cuando la región estaba por encima del agua.
Los núcleos de sedimentos y las lecturas del sonar que tomaron en ese viaje de investigación podrían cambiar radicalmente la comprensión de los científicos sobre cómo era el Puente Terrestre de Bering y qué animales y plantas había allí cuando estaba por encima del agua.
Los núcleos revelan una transición abrupta de agua dulce a sedimento marino al final de la última Edad de Hielo, cuando el puente terrestre se convirtió en el Estrecho de Bering. Los núcleos que recogieron de 36 sitios de muestreo contenían sedimentos de lagos de agua dulce, así como macrofósiles, materia orgánica utilizada posteriormente para la datación por radiocarbono, polen y ADN sedimentario antiguo. Las muestras de polen revelan que había árboles leñosos en el Puente Terrestre de Bering, mientras que los estuches de huevos de Daphnia, las hojas de musgo y otros macrofósiles muestran una amplia presencia de agua dulce en la región.
Los resultados podrían ayudar a responder una vieja pregunta: ¿por qué algunos animales cruzaron el Puente Terrestre de Bering, mientras que otros se quedaron atrás? Aunque es probable que el puente terrestre estuviera dominado por ríos de agua dulce y pantanos, que pueden haber atraído a animales como las aves, algunas áreas más elevadas y más secas deben haber permitido que animales más grandes como caballos, mamuts y bisontes hicieran el cruce. Los investigadores incluso detectaron ADN antiguo de mamut en un sitio.
"Puede que haya sido pantanoso, pero aún estamos viendo evidencia de mamuts", dijo Fowell. "Aunque se trataba principalmente de llanuras aluviales y estanques, los animales de pastoreo estaban presentes, solo que subiendo por las zonas más altas y secas".
Pero el paisaje húmedo podría haber impedido que algunos animales, como los rinocerontes lanudos, los camellos americanos y los osos de cara corta, se desplazaran de un continente a otro.
"El paisaje húmedo y acuoso podría haber sido una barrera para algunas especies, o una vía para las especies que realmente se desplazan por el agua", dijo Hill. "Así es como esto encaja en el panorama general".