La sentencia le impide acercarse o comunicarse durante 15 años con su padre, octogenario, que deseaba que no volviera a convivir con ellos
VALÈNCIA, 6 Jul. (EUROPA PRESS) -
La sección segunda de la Audiencia de Valencia ha condenado a cinco años y nueve meses de prisión a un hombre de 46 años que acuchilló a su padre octogenario en su vivienda porque la comida estaba fría. La sala le impone la prohibición de acercarse a menos de 500 metros de su domicilio y de los lugares que frecuente la víctima y de comunicarse con ella por periodo de 15 años.
El tribunal señala que estas últimas medidas son de imposición preceptiva y su duración "permite garantizar el deseo del padre, congruente con la gravedad de los hechos cometidos por su hijo, de que no vuelva a convivir con ellos", según la sentencia facilitada por el Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana (TSJCV).
La sentencia se dicta después de que en la vista, celebrada en la Audiencia de Valencia, ministerio fiscal y acusación particular en sus calificaciones definitivas calificaran los hechos de homicidio en grado de tentativa con el parentesco de agravante y la atenuante de confesión. La defensa se adhirió a las acusaciones al manifestar el acusado su conformidad con los hechos.
Los hechos probados de conformidad con las partes se remontan al 4 de enero de 2016 cuando el acusado, con antecedentes penales por hechos diversos, estaba en el domicilio familiar sobre las 14.00 horas con su padre, de 82 años, y su madre. Y se produjo una discusión entre ellos en la que el hijo cogió un cuchillo de dos centímetros de ancho y 10,5 de largo, que le clavó en la espalda al padre, a la altura del omóplato izquierdo, con intención de matarle.
El condenado se quejó de que la comida estaba fría. En ese momento se inició una discusión en la que el padre le dijo que se la calentara en el microondas y el hijo, que reconoció los hechos desde el momento posterior a su comisión, le clavó el cuchillo de cocina por la espalda.