ALICANTE 28 Mar. (EUROPA PRESS) -
El Ayuntamiento de Alicante estudia la apertura de un expediente disciplinario y sancionador al grupo de bomberos que este pasado jueves "se enfrentaron de manera agresiva a los policías locales e intentaron, con una actitud violenta, asaltar el salón de plenos" durante la celebración de la sesión ordinaria correspondiente al mes de marzo, según ha destacado el equipo de gobierno en un comunicado.
La portavoz del ejecutivo municipal, Cristina Cutanda, ha recalcado este viernes que la plantilla del Servicio de Prevención y Extinción de Incendios (Speis) se ha aumentado en 47 plazas desde 2012, "al tiempo que se han incrementado las retribuciones un 14 por ciento en el último año y un 15% en 2023".
En relación con las condiciones laborales del personal del Speis, por las que protestaba el grupo de bomberos que irrumpió este jueves en el pleno, Cutanda ha precisado que "la plantilla del cuerpo ha pasado de 132 plazas en 2012 a las actuales 179, con un incremento de 47 efectivos", y ha recalcado que el aumento de sueldo para los profesionales del servicio "ronda el 30% en los dos últimos años tras dos subidas del 14% y del 15% en esos ejercicios".
Asimismo, la portavoz del gobierno local ha destacado que "el Ayuntamiento ha realizado entre 2020 y 2025 inversiones por más de seis millones de euros en nuevos vehículos, equipamiento y reformas".
Y ha agregado: "A esta cantidad hay que añadir otros tres millones más incluidos en el capítulo seis de inversiones del presupuesto del Speis para este año. Además, en 2023 se habilitó por primera vez en el servicio un contrato para el mantenimiento del parque móvil de 360.000 euros hasta 2027. Y si se suma el capítulo dos de gasto corriente en bienes muebles e inmuebles, dotado con un millón más, la cifra destinada a los bomberos de Alicante en cinco años supera los diez millones de euros".
"RECUERDAN A EPISODIOS NEGROS"
Cutanda ha reiterado su "frontal rechazo" a los "comportamientos intimidatorios y amenazantes que pusieron en riesgo la integridad física de los miembros de la corporación municipal, público y demás asistentes" al pleno del jueves.
Y ha valorado: "Las reivindicaciones de ese grupo de bomberos, con independencia de que sean o no asumibles, recuerdan a otros episodios negros de asaltos a instituciones que creíamos superados en el marco actual de nuestra democracia".
"Nos preguntamos hasta donde pretendía llegar ese grupo de bomberos en su forcejeo y cargando de forma tan agresiva contra los agentes, porque si hubieran conseguido romper y saltarse el cordón policial no sabemos qué hubiera podido pasar", ha recalcado, para posteriormente añadir que "hubo personas en el salón de plenos que llegaron a temer por su integridad física".
Y ha añadido: "Estos comportamientos son absolutamente deplorables y no deberían repetirse nunca más, porque cualquier reivindicación o discrepancia debe hacerse por otros cauces en los que no tiene cabida la agresividad ni la intimidación".
"Los alicantinos no se merecen que nadie amenace e intimide a sus legítimos representantes por mucha discrepancia que pueda haber y más si son funcionarios municipales los que recurren a la violencia", ha subrayado.