El Ayuntamiento de Valencia ha pagado 2.500 facturas para evitar cortes de suministro a personas vulnerables

VALENCIA 17 Nov. (EUROPA PRESS) -

El alcalde de Valencia, Joan Ribó, ha asegurado este jueves que el Ayuntamiento de la ciudad ha asumido el pago de cerca de 2.500 facturas de agua, luz o gas para evitar el corte de estos suministros a personas con escasos recursos, para lo que el consistorio ha destinado un presupuesto de unos 300.000 euros desde finales del año 2015.

Así lo ha indicado el primer edil en declaraciones a los medios antes de la celebración del Pleno del Ayuntamiento, al ser inquirido sobre los cortes de suministro en la ciudad, tras conocerse que la anciana fallecida en Reus (Tarragona) esta semana en el incendio de su vivienda no disponía de suministro eléctrico tras un corte de luz por parte de Gas Natural.

En esta línea, Ribó ha indicado que a finales de 2015 el consistorio valenciano llegó a un acuerdo con Aguas de Valencia, Iberdrola y Gas Natural "para que no se cortara el suministro y en caso que se cortara, el Ayuntamiento pagaría la factura para evitar los cortes".

Así, el consistorio ha pagado 2.500 facturas para evitar los cortes de agua, luz y gas de personas en situación de vulnerabilidad, para lo que se ha dispuesto de un presupuesto de unos 300.00 euros. "En Valencia, no digo que no haya habido ningún corte, pero sí se ha evitado en lo fundamental", ha destacado el alcalde, quien ha asegurado que seguirán desarrollando esta labor.

No obstante, ha considerado que estas grandes empresas "con beneficios de miles de millones de euros" deben trasladar su responsabilidad social a estas situaciones y afrontar los pagos de estas personas para evitar los cortes en los suministros.

SITUACIÓN "INTOLERABLE"

"Creo que se ha de hacer a nivel estatal; no es correcto que por causas sociales se corten servicios básicos, no en Valencia, pero sí en otras ciudades, y pueden provocar problemas como el que han provocado en Reus; creo que es absolutamente intolerable", ha manifestado.

Así, ha apuntado que "si no hay otra solución", esta situación la arreglarán los ayuntamientos, "pero se han de buscar otras medidas para que parte de los beneficios de las grandes empresas vayan a paliar estos problemas".