ALICANTE 10 Nov. (EUROPA PRESS) -
La Guardia Civil de Alicante ha detenido en Almoradí a un total de 14 personas por supuestamente formar una red dedicaba al robo de objetos en viviendas y almacenes y a su posterior venta. Los arrestados también ofrecían droga a su clientela habitual, según ha informado el instituto armado en un comunicado.
Se les atribuyen hasta ocho delitos de robo con fuerza en viviendas, otros seis de robo con fuerza en vehículos, dos continuados de hurto y receptación, respectivamente, uno más contra la salud pública y un último de pertenencia a organización criminal.
Los detenidos son 12 hombres y dos mujeres, españoles y marroquíes, con edades comprendidas entre 19 y 48 años. Los agentes les han intervenido objetos robados por valor de 10.000 euros.
La supuesta red se dedicó durante meses a vender objetos sustraídos en robos en el interior de viviendas, almacenes y vehículos. Además, a la clientela que acudía a comprar los objetos robados les ofrecían droga.
Entre los objetos recuperados, figuran aparatos electrónicos como ocho televisores, 14 teléfonos móviles, dos tablets, tres cámaras de fotos, dos videoconsolas, una videocámara, un reproductor DVD, un ordenador portátil, tres decodificadores de señal de satélite digital.
Los guardias civiles también se han incautado de maquinaria de obra, un generador eléctrico, dos compresores de aire comprimido, dos máquinas de corte radiales, una amasadora, una taladradora y una desbrozadora de gasolina. Además, cuatro bicicletas, dos espadas katana, una pistola eléctrica y una colección de monedas. Todo está valorado en más de 10.000 euros.
Asimismo, los agentes han intervenido 2.010 euros en efectivo, 15 tabletas de hachís, 83 bellotas de hachís con un peso total de 2.082 gramos y 50 gramos de marihuana.
DELITOS ENCADENADOS
Uno de los detenidos, español de 32 años y vecino de Almoradí, resultó ser el cabecilla de la trama y llegó a hacer de su vivienda un establecimiento de compra-venta de objetos robados conocido a nivel comarcal.
En torno a él y a su negocio giraba una serie de delitos encadenados. Entre los más destacados, había una banda de marroquíes que le compraban o encargaban objetos que iban acumulando en un almacén. Cuando acumulaban un lote, lo metían en furgonetas como chatarra y pasaban la frontera de Marruecos y lo vendían.
El cabecilla de otro grupo, que se dedicaba a robar en el interior de vehículos, le conseguía productos de fácil salida en el mercado como teléfonos móviles, tabletas y navegadores GPS.
Los detenidos también hacían robos por encargo, como el de un generador valorado en 2.000 euros, e incluso le llevaron un guacamayo y un loro yaco, robados.
Otras personas de su entorno le ayudaban a la carga y descarga de material robado, a su almacenamiento y a funciones de vigilancia para alertar de la presencia policial.
VENTA DE DROGAS
Según la Guardia Civil, la casa tenía tal afluencia de gente que un traficante de drogas de Formentera del Segura le ofreció abrir una "sucursal" de su negocio en Almoradí.
A partir de entonces, también comenzó a vender droga al menudeo. De hecho, el cabecila tenía un cliente que sustraía gasoil de la empresa donde trabajaba --se llevó hasta 900 litros-- y lo cambiaba por droga.
Cinco meses de investigación han culminado con el registro de tres domicilios y un almacén agrícola en Almoradí, además de una vivienda en Formentera del Segura, donde encontraron más de dos kilos de droga, 2.010 euros en efectivo y numerosos objetos robados valorados en más de 10.000 euros.
A lo largo de toda la operación, la Guardia Civil ha detenido a 14 personas --11 españolas y 3 marroquíes-- de las localidades de Almoradí, Callosa de Segura, San Fulgencio y Formentera del Segura. Tras pasar a disposición judicial, un marroquí de 32 años ha ingresado en prisión y los otros 13 han quedado en libertad con cargos.