VALÈNCIA 21 Dic. (EUROPA PRESS) -
La vicepresidenta de la Generalitat Valenciana, Susana Camarero, ha expresado su "profunda indignación" ante la actitud del presidente de la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ), Miguel Polo, durante la primera reunión de la junta de gobierno del organismo tras la dana del 29 de octubre, pues "no ha dado explicaciones claras ni asumido ninguna responsabilidad sobre los graves errores de gestión que contribuyeron al impacto devastador de esta tragedia". "Es inadmisible", ha subrayado.
Camarero ha incidido en que el "apagón informativo" de la CHJ durante las horas "críticas" de las inundaciones "es una prueba evidente de una gestión deficiente y una falta de previsión alarmante". "Mientras cientos de familias sufrían las consecuencias de las inundaciones, la Confederación no activó los protocolos adecuados ni proporcionó información actualizada para coordinar la respuesta de emergencia", ha añadido, según ha informado la Generalitat en un comunicado.
A su juicio, es "inadmisible" que el presidente de la CHJ "haya intentado desviar la responsabilidad hacia otras instituciones en lugar de abordar las deficiencias internas del organismo que dirige". "La Generalitat exige una auditoría completa de la gestión de la CHJ y la implementación inmediata de medidas correctivas para garantizar que una situación como esta no se repita", ha subrayado.
Asimismo, ha instado al Ministerio de Transición Ecológica a "tomar cartas en el asunto y supervisar de manera más estricta el cumplimiento de los protocolos de emergencia por parte de la Confederación". "La seguridad y bienestar de los ciudadanos no puede estar supeditada a excusas o a una gestión que claramente no está a la altura de las circunstancias", ha concluido.