VALNCIA 4 Jun. (EUROPA PRESS) -
La Premio Rei Jaume I 2019 al Emprendedor, Carlota Pi, destaca la energía verde como una tendencia "transversal y global" en la actualidad que va más allá del sector de la electricidad, su campo en la compañía Holaluz: "Es absolutamente 'mainstream'. Hace años nos vendíamos como verdes y digitales y pensaban que estábamos un poco locos; hoy lo ves en la publicidad de Iberdrola o Repsol".
Esta emprendedora de 42 años de Barcelona es cofundadora, 'frundraising' y marketing de Holaluz, un proyecto que ideó con compañeros "en un bar tomando cervezas" y que ocho años después cuenta con 170 empleados y 200.000 clientes de "todos los códigos postales de España".
Se trata de un crecimiento que para Pi pone de relieve que la energía limpia "hace seis o siete años era un concepto de nicho y había poca gente conectada", mientras actualmente traspasa fronteras y llega a marcas de ropa y comida con líneas específicas.
En su caso, recuerda que arrancaron con "un propósito muy fuerte: conectar a personas con la energía verde para un mundo 100% renovable, para liderar un cambio". Como muestra del cambio de mentalidad, resalta el crecimiento del 35% en Valencia en los últimos meses, con una media de 500 clientes más al día, o el contrato en exclusiva para distribuir unas baterías de Tesla en España.
"Estamos liderando esta transformación", celebra en declaraciones a Europa Press, por lo que la emprendedora ve el Premio Jaume I como el reconocimiento a ocho años de trayectoria y "una bocanada de aire fresco".
INVITA A LA EJECUCIÓN "SALVAJE" DE UNA IDEA
Bajo este prisma, invita a seguir su ejemplo y "lanzarse a la ejecución salvaje si tienes una idea con un propósito trascendente y fuerte", si bien reconoce que "emprender es un camino duro y hay que seguir remando con esfuerzo, sincronización y confianza. Como en el remo, que van hacia atrás sin ver adónde van".
Pero, sobre todo, hace hincapié en la importancia de "rodearse de gente potente que esté alineada con unos valores". "Las compañías no son nada, son las personas", subraya, e insta aprender en el camino porque "a bailar se aprende bailando".
En este contexto, Pi cree que en 2019 hay "muchísima más cultura empresarial que hace diez años" y descarta que la crisis económica de entonces les pudiera haber echado atrás. "Estamos a años luz e iremos a mucho más", asegura.
"EJEMPLO PARA LAS JÓVENES"
El jurado del Premio Rey Jaume I valora su visión y conocimiento del negocio al "abordar un sector concentrado y complicado como el energético de forma disruptiva", así como su apuesta por las energías renovables y el autoconsumo con el objetivo de reducir el coste al usuario mediante nuevas tecnologías. "Somos una empresa 100% tecnológica; el papel es para enviar cartas de amor", ilustra la emprendedora.
Paralelamente, el jurado pone en valor su "ambición" en una trayectoria de crecimiento constante, con la mirada puesta en el siguiente paso hacia la movilidad energética y la transformación: "Es una mujer valiente, innovadora y muy preparada; un ejemplo de inspiración personal y profesional para las jóvenes".