Censo de aves en L'Albufera: buen año de la cerceta pardilla y problemas para especies ligadas a la calidad del agua

    VALÈNCIA, 23 Oct. (EUROPA PRESS) -

   El censo de aves nidificantes de L'Albufera de Valencia en 2024 deja un buen año para la cerceta pardilla, especie en situación crítica que ha registardo cinco parejas; ningún flamenco y preocupación por las especies ligadas a la calidad del hábitat, como el pato colorado y el porrón común, que siguen en situación negativa.

   En concreto, el paraje ha acogido en 2024 la nidificaron de cinco parejas de cerceta pardilla, especie declarada en situación crítica en España. Dos de ellas lo hicieron, por vez primera, en el Tancat de la Pipa, área de reserva gestionada por SEO/BirdLife y Acció Ecologista-Agró con el apoyo de la Confederación Hidrográfica del Júcar.

   Este resultado está ligado a los trabajos de mejora del hábitat y la calidad del agua, y también al refuerzo de la población de esta especie realizado en el marco del proyecto europeo LIFE Cerceta Pardilla, coordinado por la Fundación Biodiversidad del MITECO, y en el que SEO/BirdLife y la Generalitat Valenciana participan como socios.

   Este es uno de los datos más significativos de los censos de aves acuáticas realizados en el Parque Natural de l'Albufera en la época de nidificación de 2024, que han revelado la presencia de 18.184 parejas reproductoras. Esta cifra sitúa a l'Albufera, humedal Ramsar y espacio de la Red Natura 2000, entre las zonas húmedas europeas de mayor importancia.

   El censo anual cubre 14.000 hectáreas de arrozales, las 3.500 ha de la laguna, las zonas de reserva y las playas, y es coordinado por SEO/BirdLife, con la participación del Servicio de Conservación de Ambientes Acuáticos del Ayuntamiento de Valencia y la Oficina Técnica del Parque Natural de la Generalitat Valenciana.

   "El censo global de 2024 ha resultado un 18% menor que el obtenido en 2023. Pero esta aparente reducción se debe, principalmente, a la ausencia de la numerosa colonia de flamenco común, que no se estableció en 2024. Un hecho que puede explicarse por una mayor disponibilidad primaveral de agua en otros humedales peninsulares con presencia habitual de esta especie", explica en un comunicado Antonio Castelló, técnico de conservación de especies de la delegación de SEO/BirdLife en la Comunitat Valenciana.

   Otro resultado relevante de este censo es que anátidas y las aves limícolas mantuvieron sus poblaciones nidificantes globales relativamente estables con 3.511 y 1.010 parejas, respectivamente. Sin embargo, se mantiene una situación negativa crónica para el pato colorado y el porrón común --especies exigentes con la calidad del hábitat--, que con 35 y 9 parejas no llegan a prosperar fuera de las áreas de reserva como el Tancat de la Pipa, donde una adecuada gestión favorece la presencia de agua de calidad.

   También sensibles a la calidad el hábitat, en el grupo de las garzas, la garcilla cangrejera y la garza imperial, con 75 y 53 parejas respectivamente, tampoco muestran signos de recuperación. "Esto pone de manifiesto la necesidad de recuperar un hábitat adecuado con agua de calidad durante todo el año, como el que se encuentra en las áreas de reserva y los humedales artificiales para poder recuperar y mantener las poblaciones de estas especies", comenta Antonio Castelló.

PROBLEMAS CON LOS PREDADORES NATURALES

   El chorlitejo patinegro se ha mantenido estable con 54 parejas, pero ha visto limitado notablemente su éxito reproductivo debido a la depredación de nidos y pollos por zorros y gatos asilvestrados. La canastera común ha pasado de 38 parejas en 2023 a 29 en 2024, en un contexto también de escasez de lugares de nidificación seguros. Otra especie afectada por los predadores naturales ha sido el charrán común, catalogado como vulnerable en el Catálogo Valenciano de Especies de Fauna Amenazadas, que ha reducido su población hasta las 145 parejas, un 44 % menos que en 2023.

   Un dato "muy positivo", ha sido la progresiva recuperación del aguilucho lagunero, especie catalogada en peligro de extinción, que ha alcanzado un máximo en 2024 en l'Albufera con cinco parejas reproductoras, una más que en 2023. Un resultado en línea con la progresiva recuperación que está experimentando la especie en el sur de Europa como resultado de su protección en los humedales. También han experimentado un significativo incremento respecto a 2023 la gaviota cabecinegra con 2.943 parejas (con un aumento del 73 %), y el charrán patinegro con 1.827 (sube un 33 %).

   "Los resultados para la mayor parte de las especies catalogadas presentes en l'Albufera señalan una necesidad urgente de restaurar hábitats degradados dentro del humedal. El Parque Natural de l'Albufera ha sufrido una significativa degradación debido a la mala calidad del agua, la pérdida de vegetación sumergida y la alteración de sus funciones hidrológicas", explica Castelló.

   El Reglamento sobre la Restauración de la Naturaleza aprobado por la Unión Europea, en vigor desde agosto de 2024, marca un hito importante al establecer objetivos claros de restauración que España debe cumplir en los próximos años, y que deben definirse en un Plan Nacional de Restauración. En l'Albufera han sido identificados diversos ambientes degradados en canales, playas y áreas de marjal que se beneficiarían de una restauración ecológica en el marco del futuro Plan.

   Proyectos exitosos como la restauración del Tancat de la Pipa han demostrado que es posible revertir parcialmente estos impactos, mejorando la biodiversidad y la calidad de los hábitats.

   El informe de SEO/BirdLife 'Áreas degradadas con posibilidades de rehabilitación en España' identifica a l'Albufera como un espacio prioritario para la restauración ecológica en España, lo que refuerza la urgencia de implementar medidas para mejorar la gestión del agua y rehabilitar hábitats claves dentro de este espacio natural protegido?. Precisamente, SEO/BirdLife desarrolla actualmente un proyecto de restauración ecológica en l'Albufera, concretamene en el Tancat de la Ratlla, para mejorar el hábitat del avetoro común, Ave del Año en 2024.

   Para poder llevarla a cabo, la ONG ambiental ha puesto en marcha la campaña de donaciones Humedales para el avetoro con el propósito de ampliar el hábitat de esta especie, que se encuentra en un delicado estado de conservación, y para poner de manifiesto el mal estado en que se encuentran los humedales.