CASTELLÓN 30 Oct. (EUROPA PRESS) -
La sección segunda de la Audiencia Provincial de Castellón ha condenado a 14 años y medio de prisión a un hombre por intentar asesinar a su expareja tras comunicarle ésta que quería separarse. Así mismo, la sentencia prohíbe al condenado residir en Benicàssim y aproximarse o comunicarse con la víctima por un periodo de 10 años desde que acabe de cumplir la pena.
La sentencia aprecia como agravante la circunstancia mixta de parentesco y obliga al hombre a indemnizar a la mujer con 72.570 euros, más los intereses legales; así como a la Generalitat Valenciana por los gastos originados en la atención sanitaria prestada a la víctima.
La sentencia considera probado que el acusado mantuvo una relación sentimental de más de 12 años con la víctima, con la que convivió unos 10 años en Benicàssim (Castellón). Una vez deteriorada la relación, a finales de 2012, el acusado se marchó a Irlanda e Inglaterra a buscar trabajo, hasta que la mujer le planteó la ruptura de la relación, lo que originó que regresara a España.
Durante dos o tres semanas el acusado llamó a la mujer y le envió mensajes con el fin de intentar retomar la relación, lo que fue rechazado siempre por ella. Sin embargo, él no aceptó la situación y decidió acabar con la vida de la que había sido su pareja.
Así, el 21 de septiembre se dirigió al domicilio de la mujer con un cuchillo y entró en el portal y, para sorprender a su víctima y evitar que pudiera reaccionar, desenroscó las bombillas de las luces del zaguán y de la primera planta y se sentó a esperar, en la oscuridad.
LE PROPINÓ VARIAS CUCHILLADAS
Sobre las 2.00 horas oyó el motor del vehículo de la mujer y cogió el cuchillo para acabar con su vida. Nada más entrar en el portal su expareja, el acusado se abalanzó sobre ella, la cual, tras ver que iba a clavarle el cuchillo, cogió la hoja del mismo para evitarlo. Ambos cayeron al suelo, donde el procesado le propinó varias cuchilladas por diversas partes del cuerpo, acción que cesó cuando bajó un vecino alertado por los gritos de la víctima.
El hombre intentó huir por el patio del edificio, pero, al no poder saltar la pared y pensando que había matado a la mujer, se hizo un gran corte con el mismo cuchillo en el abdomen. La mujer subió arrastrándose hasta su domicilio y fue auxiliada por las personas que convivían con ella.
A consecuencia de los hechos, la mujer sufrió varias lesiones que precisaron un ingreso hospitalario de 61 días, de los que estuvo 21 ingresada en la UCI, y varias intervenciones quirúrgicas. Tras el alta, sufrió tratamiento médico, rehabilitador, psiquiátrico y psicológico.
La sentencia indica que la intencionalidad homicida del acusado es "clara", ya que su actuación iba encaminada a quitarle la vida a la mujer con una preparación "exhaustiva" y dirigida a conseguir dicho propósito.
Así mismo, señala que se trata de un "claro" comportamiento machista, "en la parte más alta de los comportamientos de violencia de género, en los que, al no querer continuar la mujer la relación, el hombre reacciona con total violencia y, en este supuesto, con pretensión de quitar la vida a la que fue su pareja, ante el hecho de que la misma pudiera iniciar su vida con otra persona".