CASTELLÓN, 24 Ago. (EUROPA PRESS) - -
La Policía Local de Almassora (Castellon) ha denunciado a la propietaria de tres perros potencialmente peligrosos que supuestamente atacaron a otros dos canes y, como consecuencia de las lesiones sufridas, uno de ello falleció, según ha informado el Ayuntamiento de Almassora en un comunicado.
Los hechos ocurrieron el pasado 18 de agosto, cuando los tres canes de perfil potencialmente peligroso se escaparon y accedieron a una propiedad en la que se encontraban dos pastores alemanes. Tras la agresión, uno de los perros tuvo que ser sacrificado por un veterinario titular, que determinó que el animal no podría sobreponerse a las heridas.
La mujer no disponía de la documentación ni de las condiciones necesarias que marca la Ordenanza Municipal 11/2004 Reguladora de la Tenencia de Animales. La policía también ha hecho llegar una copia de la denuncia a la Guardia Civil para su remisión al juzgado provincial.
Desde el Ayuntamiento de Almassora han exigido a la propietaria de los perros atacantes que regularice la situación de los canes en base a los requisitos de obligado cumplimiento que determina la normativa, como inscribir a los perros en el registro municipal, mantenerlos en el interior de un recinto con medidas de seguridad para evitar su fuga y obtener un certificado de idoneidad para la tenencia de animales peligrosos.
El edil de Seguridad, Roger Beltrán, ha lamentado lo ocurrido y ha recordado que "la tenencia de animales comporta obligaciones, especialmente si se trata de especies o razas clasificadas como peligrosas". "La actuación de la Policía Local siempre está orientada a protegerla convivencia vecinal y el bienestar de los animales y la normativa ha sido ideada para garantizar que su salud y su seguridad están cubiertas en todo momento", ha incidido el concejal.
BAJO SUPERVISIÓN DEL PROPIETARIO
La ordenanza municipal de Almassora determina que los animales peligrosos deberán permanecer siempre bajo la supervisión del propietario, aunque estén en el interior de una propiedad privada. La Policía Local recuerda que para transitar por la vía pública es obligatorio la utilización de una correa de al menos dos metros de longitud y el uso de un bozal homologado y adecuado a las dimensiones y características físicas del can.
Asimismo, tal como establece la normativa, estos animales no podrán ser conducidos por menores de edad o personas sin la capacidad de ejercer el control necesario. Además, deberán estar inscritos en el registro de perros potencialmente peligrosos y una misma persona no podrá pasear a más de uno de estos animales simultáneamente.