ALICANTE, 10 Abr. (EUROPA PRESS) -
Agentes de la Guardia Civil han detenido a un hombre de 36 años, vecino de Busot (Alicante), acusado de abusar sexualmente de seis mujeres, tres de ellas menores de edad, de 13, 15 y 17 años. El detenido supuestamente se ofrecía como entrenador personal y se llevaba a sus víctimas a casa, bajo el pretexto de darles un masaje deportivo, según ha informado el instituto armado en un comunicado.
La detención del presunto autor de los hechos, por parte de la Guardia Civil de El Campello, se pudo llevar a cabo gracias a la denuncia de una mejor, de 17 años. Los investigadores no descartan la aparición de más víctimas, que no hayan denunciado hasta el momento. El detenido ya ha ingresado en prisión, por orden judicial.
Según la Guardia civil, el detenido siempre actuaba de la misma forma: seleccionaba y captaba a sus futuras víctimas en el gimnasio de la localidad, del que era usuario, y se les ofrecía como preparador físico, argumentando tener una titulación de entrenador personal.
De este modo las convencía, valiéndose también de la amistad personal que tenía previamente con las respectivas familias de las chicas elegidas. Tras entrenar con ellas, las convencía para ir a la vivienda, a sabiendas de que su pareja no iba a estar en casa durante ese rato y aquí es donde comenzaba su acción delictiva, que ha sido detallada "a la perfección" por todas las víctimas.
RITUAL
Al entrar al domicilio, el presunto abusador cerraba la puerta de entrada con pestillo, ponía música y les comentaba que sería "recomendable" darles un masaje "deportivo" para crujirles la espalda, excusa con la que comienza a realizar los diversos tocamientos durante 20 minutos, que cronometraba con un reloj.
Todas las víctimas coincidieron en declarar que, ante estos abusos, el ahora detenido "mostraba explícitamente estar disfrutando de la situación con gran placer". Una de las víctimas, de 26 años, fue a su casa con motivo de una propuesta de un falso trabajo en la cafetería de un supuesto amigo del detenido, quien intentó llevar a cabo el mismo "ritual" del masaje deportivo, aunque en esta ocasión hubo resistencia por parte de la mujer.
En otro de los casos, la menor relató a los agentes que fue invitada a dicho gimnasio por el detenido, tanto ella como sus amigas, a cambio de esos masajes, supuestamente necesarios para el correcto entrenamiento. Otra de las menores, la de 13 años, manifestó en su denuncia de los hechos que el detenido intentó seguir con esta práctica, valiéndose de la amistad con los padres de la menor, quien tuvo que bloquearle en su teléfono móvil, debido a la "insistencia" que mostraba.
Según ha desvelado la investigación, el arrestado acudía de forma habitual a dicho gimnasio y se mostraba "extremadamente amable y cariñoso" con las mujeres que también acudían al centro deportivo. Se acercaba a aquellas que tenían buena presencia física, con la excusa de enseñarles a realizar correctamente un ejercicio y en ese momento comenzaba a entablar conversación con ellas para, finalmente, ofrecer sus servicios como entrenador personal y concertar las visitas a su casa.
La Guardia Civil tiene conocimiento de que varias mujeres han dejado de acudir al gimnasio "de forma repentina", por lo que sospecha que pueda haber más casos de abusos sexuales que aún no hayan sido denunciados por las víctimas. Por ello solicita que, si es así, que lo pongan en conocimiento de las autoridades.