Detenido un hombre por robar 95.000 euros en un bungaló al que acudió días antes como cerrajero

   La víctima sospechó del acusado al que habían contratado para abrir una puerta pero que rompió un cristal para acceder

   ALICANTE, 15 Nov. (EUROPA PRESS) -

   La Policía Nacional ha detenido en Benidorm (Alicante) a un hombre como presunto autor de un robo con fuerza en un bungaló, al que acudió días antes como cerrajero. El arrestado está acusado de sustraer 60.000 euros y 10.000 dólares en metálico --en total casi 70.000 euros--, joyas, relojes y bolsos de alto valor, así como teléfonos móviles y un ordenador portátil. En total, supuestamente se apoderó de un botín valorado en 95.000 euros.

   Los agentes han determinado que el detenido se encuentra en situación irregular en España y que tiene antecedentes policiales por otros hechos. Las diligencias han sido remitidas al Juzgado de Instrucción de Guardia de la ciudad, ha informado la Jefatura en un comunicado. Según la Policía, gran parte del robo lo cometió en una caja fuerte, que consiguió arrancar de la estructura de la casa.

   El suceso se descubrió cuando un vecino de la víctima la alertó de que alguien había entrado en su bungaló. Al regresar, comprobó que le faltaban varios enseres y dinero en efectivo. El valor total de lo robado supera los 95.000 euros.

   La víctima explicó a los agentes que, días antes de los hechos, unos familiares habían olvidado las llaves dentro de la casa, por lo que contrató a un cerrajero para poder acceder al interior. Para ello, este hombre usó el mismo 'modus operandi' al que luego recurrió para el robo ya que rompió una ventana.

   Posteriormente, un cristalero se encargó de cambiar el cristal dañado. Ante esta situación, la víctima expresó sus sospechas sobre el cerrajero, quien tuvo acceso a la vivienda y no pudo ser localizado después del incidente.

   La Policía Nacional realizó una inspección ocular en la vivienda y, tras las diligencias y pruebas recabadas, se logró identificar y detener al autor del robo en la misma localidad de Benidorm. Se trataba de un varón de nacionalidad rusa, de 52 años, que resultó ser el cerrajero del que se tenían sospechas.