ALICANTE 15 Oct. (EUROPA PRESS) -
La Policía Nacional ha detenido en las localidades de Alicante y Elche a tres personas por un delito de tráfico de drogas, al presuntamente formar parte de una organización "bien estructurada" a la que se intervino un total de 594 plantas de marihuana en el interior de una casa de campo. Se busca a un cuarto implicado, por lo que las diligencias siguen abiertas.
La investigación comenzó al recibir una información sobre un posible cultivo interior en una vivienda ubicada en la zona rural de Elche. De esa casa provenía un fuerte olor a marihuana y se escuchaban máquinas industriales de forma constante, que podrían ser sistemas de ventilación usados para este fin, informa el cuerpo policial.
Cuando los agentes realizaron las primeras indagaciones sobre el terreno, descubrieron que se trataba una casa de dos plantas que parecía estar abandonada. El vallado perimetral estaba tapado para evitar que se viera parte del inmueble desde el exterior. Lo mismo ocurría en una de las terrazas de la planta más alta, donde habían colocado una tela que ocultaba varias maquinas de aire acondicionado.
Los investigadores constataron que de ese lugar emanaba un fuerte olor a marihuana y que se oía algún tipo de maquinaria encendida. Además, todas las puertas y ventanas estaban cerradas y casi todas ellas selladas y tapadas.
A medida que fue avanzando la investigación, la Policía supo que se trataba de una casa de campo alquilada y que los responsables de aquella plantación eran, al menos, tres personas.
También concluyó que se trataba de un grupo organizado con un reparto claro de tareas: dos de ellos eran los cabecillas y marcaban las directrices de actuación, mientras un tercero se encargaba de las labores de mantenimiento y vigilancia de los cultivos, como si de un peón se tratara. La casa de campo estaba alquilada, por mediación una cuarta persona, por la cantidad de 2.200 euros mensuales.
Este cuarto realizaba funciones de mediación y ponía en contacto a los autores con el propietario de la casa para formalizar el correspondiente contrato de alquiler. El dueño del inmueble desconocía el uso que se le daba a la finca.
Para ahorrar costes y no pagar la luz, los autores habían realizado un enganche ilegal a la corriente eléctrica con el que derivaban gran cantidad de energía para alimentar todo el sistema de cultivo.
DISPOSITIVO DE DETENCIONES
Seguidamente se estableció un operativo sobre la casa de campo y se logró detener al hombre encargado de la guarda y custodia del cultivo. Al mismo tiempo, se estableció otro equipo de trabajo para la interceptar y arrestar a los dos cabecillas de la organización, que fueron localizados y detenidos en la ciudad de Alicante.
También se intervinieron más de 3.400 euros en metálico. Junto con el dinero, se encontraron todos los aparatos utilizados para este tipo de cultivos, como ventiladores, focos, filtros de carbono, máquinas de aire acondicionado, abonos para las plantas y básculas.
Se descubrió que las instalaciones tenían un alto grado de profesionalidad en el montaje porque se había usado un aislante de lana de roca en las paredes para evitar altas temperaturas en el lugar donde se encontraba el cultivo.
Los arrestados, una mujer y dos hombres de entre 40 y 56 años, proceden de Albania, Serbia y Rusia. Solo uno tenía antecedentes por hechos similares y otro se encontraba en situación irregular en España.
Dos de ellos fueron puestos a disposición del Juzgado de Instrucción de guardia de Alicante, mientras que el último pasó al Juzgado de Instrucción de guardia de Elche. Las diligencias han quedado abiertas para localizar a un cuarto implicado y conocer cuál era su vínculo con la organización.