VALÈNCIA, 16 Nov. (EUROPA PRESS) -
El psicólogo Juan Rodríguez, portavoz del Colegio de Psicología de la Comunitat Valenciana y experto en emergencias y catástrofes, ha indicado tras la muerte de más de 200 personas en Valencia por la DANA que "el duelo es un proceso lento en el que hay que atravesar el dolor para llegar a la calma".
Este experto ha señalado a Europa Press que "hay que poder hablar" de lo sucedido y saber que "mucho de lo que se siente, de esa tristeza, es normal", al tiempo que ha considerado que "el tiempo y los rituales sociales" que se hagan "irán aliviando paulatinamente, poco a poco".
Rodríguez ha considerado, más de dos semanas después de la "catástrofe", que se está pasando a una "fase de bajada" tras "la etapa de euforia" siguiente al suceso con presencia de "medios de comunicación" en la zona afectada y la "sorprendente" movilización de voluntarios y otros recursos para atender a los damnificados.
"Después viene la etapa de caída brusca en la que todo eso desaparece y se encuentra la soledad. Aparecen rabia, depresiones y momentos donde estas patologías van a ser más visibles", ha afirmado Rodríguez, que ha añadido que posteriormente "viene una subida lenta de recuperación y de normalización".
El psicólogo ha manifestado que ante "una situación de catástrofe como esta, con un impacto tremendo en muchas personas" y con "muchas que han vivido escenas muy dramáticas" hay que tener en cuenta la "capacidad de respuesta" de cada una para afrontar lo ocurrido. Ha comentado, según estudios, "el 70 por ciento de las personas se recupera en uno, dos o tres meses de forma espontánea sin ayuda profesional" y "solo con apoyo de sus grupos de referencia, de su familia, de las personas próximas".
"Después de un impacto y de una situación de emergencia parece que todo el mundo esté afectado. Se generan alteraciones del sueño, de adaptación y sentimiento de inseguridad y ansiedad excesiva", ha aseverado. Ha insistido en que esos son "fenómenos absolutamente normales como respuesta a una situación de estrés muy agudo y mantenido" como el de la DANA y ha resaltado que "eso desaparece con el tiempo de forma espontánea afortunadamente".
El especialista ha agregado que se estima que "solo un 30 por ciento de los directamente expuestos" a sucesos como este "desarrolla un cuadro de necesidad de atención psicológica más especializada" y ha detallado que "solo un pequeño porcentaje desarrolla un estrés postraumático".
Respecto al grupo que "va a necesitar ayuda psicológica en mayor o menor grado", ha comentado que el nivel "de afectación" dependerá también de "la historia previa que haya tenido con situaciones parecidas --en alusión a quienes tienen "experiencias previas traumáticas"--, de la predisposición y de su vulnerabilidad".
Juan Rodríguez ha afirmado que para ellos "habrá que crear dispositivos de prevención y de atención a medio o largo plazo". "El grupo que realmente quedará afectado con un estrés postraumático más crónico necesitará un seguimiento de salud mental de más larga duración", ha apostillado.
Sobre sensaciones que pueden vivir afectados por la DANA ante nuevos episodios de este tipo y las alertas correspondientes, el psicólogo ha apuntado que "ocurre una revictimización". "Se sigue hablando de lo mismo, sufres un escenario que te recuerda a otro de inseguridad, de imprevisibilidad, de no control de variables que son externas a ti, y vuelve otra vez a agudizarlo", ha expuesto.
Rodríguez ha comentado que "eso ocurre en los que directamente han estado sufriendo de una forma más aguda" la DANA y sus consecuencias, pero ha advertido de que "en general, hay efecto en toda la población". "Estas situaciones hacen que tengamos un historial de acontecimientos. Actualmente se habla de traumas complejos o traumas sumativos", ha asegurado, además de señalar que existe "una mayor vulnerabilidad cuando más acontecimientos hay relacionados".
"NO PROCESADO MENTALMENTE"
Igualmente, ha aludido a la reacción de "preocupación" que pueden generar las alertas que han llegado con las DANAS. "Son algo automático, no procesado mentalmente. No es racional, se activa una parte del sistema nervioso que es automática. Cuando se dispara una alerta, el primer mecanismo que se pone en marcha es una parte del sistema nervioso que solo hace dos funciones: atacar o huir", ha explicado.
Asimismo, ha manifestado que "otra parte automática del cuerpo genera, si el estrés es muy fuerte, una paralización, un bloqueo emocional y físico" y ha indicado que personas que lleguen a esa situación pueden estar entre quienes "tengan más probabilidad de --necesitar-- un seguimiento para evitar un posible estrés postraumático".
Sobre el colectivo que más habrá que cuidar para afrontar lo sucedido y sus efectos, Juan Rodríguez ha señalado que será "la población más vulnerable" y quienes "han sufrido el impacto más directo". Entre ellos, ha citado "niños con más vulnerabilidad, personas con enfermedades crónicas --sobre todo si "no tienen una red social que les sustente o apoyo de gente próxima--, mayores --en especial solos--, o personas con una diversidad funcional que no pueden procesarlo". "Con esas personas tenemos que estar más atentos", ha dicho.
"ATENCIÓN INDIVIDUALIZADA"
Respecto a los recursos para atender a quienes requieran asistencia en la postDANA, el especialista ha afirmado que "va a depender un poco de las necesidades". "Desconozco cuáles son las previsiones que tienen los servicios sanitarios oficiales para cubrir esa expectativa. Entiendo que ante una previsión como esta estarán preparando esos dispositivos y los estarán adecuando a la demanda que irá surgiendo", ha asegurado.
"Cada problemática va a tener que tener una atención individualizada muy personalizada porque cada persona responderá de un modo diferente", ha subrayado el psicólogo, que ha apuntado que se tendrá que contar con "unidades de personas --"muy cualificadas--" para "tratar el trauma". "Estamos hablando de efectos más duros y de más difícil tratamiento, ya de una patología, de un cuadro más serio", ha remarcado.