ALICANTE, 29 Abr. (EUROPA PRESS) -
El Consejo Escolar del CEIP Voramar, en Alicante, ha asegurado que es "totalmente falso" que se utilizara una bandera republicana en una actividad cultural llevada a cabo en el centro por el Día del Libro y ha pedido a los grupos políticos que no se hagan eco de la "falsa noticia" ni "utilicen al alumnado para sembrar odio". Según ha explicado, los niños estaban sentados sobre telas de seis colores distintos para diferenciar su grupo burbuja.
En concreto, las familias se han referido a las declaraciones de la concejal de Educación, Julia Llopis (PP), en las que acusaba al conseller de Educación, Vicent Marz, de "aleccionar a escolares" con una bandera republicana y por lo que pedía su dimisión. Asimismo, el PPCV reclamó la apertura de un expediente informativo y advirtió que pediría explicaciones al conseller para "llegar al fondo de la cuestión".
En este contexto, las familias del centro educativo han solicitado a los grupos municipales, en un comunicado, que "no utilicen al alumnado para descalificarse, sembrar odio y perjudicarse políticamente".
En la misma línea, exigen a políticos y medios la "rectificación" de las publicaciones que muestran fotografías "manipuladas" del alumnado de infantil sentado sobre telas de colores que supuestamente forman una bandera republicana, ya que argumentan que es "totalmente falso".
"Es más que constatable la falsedad de dichas informaciones, así como la manipulación de la imagen publicada, ya que no se trataba de una bandera sino de telas de 6 colores distintos para que el alumnado de infantil diferenciara su grupo burbuja y mantuviera las medidas 'anticovid'".
Además, el consejo escolar señala que es "demostrable" que lo que se mostró como color rojo, "realmente era naranja". Por ello, piden que se deje de utilizar a los menores para "fracturar a la sociedad y sembrar el odio entre nuestra comunidad educativa", tal y como sostiene Ana Abellán, presidenta del Ampa.
Abellán sostiene que la comunidad del CEIP Voramar es una comunidad "plural", con más de 25 años formando en el "respeto" y en valores "cívicos e integradores", por lo que arrojar dudas con esta "intencionalidad partidista" no hace sino perjudicar su buen nombre y la trayectoria educativa del centro.
En definitiva, desde el centro solicitan la "máxima responsabilidad" con este asunto, "puesto que con el ruido generado y su instrumentalización política, se está poniendo en riesgo la matrícula de cursos venideros, en un momento tan delicado en el que las familias buscan centro donde escolarizar a sus hijos".