VALNCIA 21 May. (EUROPA PRESS) -
Fernando Belhot, asesor financiero o fiduciario en Uruguay del expresidente de la Generalitat y exministro de Trabajo Eduardo Zaplana, ha hecho efectiva una transferencia de unos 5,7 millones de euros procedentes de cuentas de Suiza que supuestamente usaba para gestionar el patrimonio que procedería de presuntos sobornos por las concesiones del Plan Eólico de la Comunitat Valenciana y de las ITV a sociedades vinculadas a la familia Cotino, según ha avanzado eldiario.es y han confirmado a Europa Press fuentes de la investigación.
Este gestor patrimonial de Zaplana mostró a las autoridades judiciales españolas su voluntad de colaborar en la investigación del 'caso Erial', en el que el expresidente figura como principal investigado, y se mostró dispuesto a autorizar la transferencia de los fondos que gestiona en el extranjero. En concreto, ofreció poner a disposición de las autoridades españolas 6,7 millones de euros ocultos en varios países y señalar los 3,3 millones en propiedades, según consta en distintos documentos incluidos en el sumario.
Belhot debe hacer efectivo el abono de alrededor de otros 900.000 dólares próximamente, según han indicado las mismas fuentes. Asimismo, según señala eldiario.es, la justicia ya ha recuperado también otros 200.000 euros de una cuenta española a nombre del fiduciario uruguayo, a los que se suman otros 2,3 millones que se han conseguido del dinero que el exjefe de gabinete de Zaplana, Juan Francisco García, regularizó a través de la amnistía fiscal del exministro de Hacienda del Gobierno del PP Cristóbal Montoro. También se han embargado bienes a nombre de la sociedad Gesdesarrollos en Altea, Benidorm y otras localidades por más de dos millones.
En virtud de su acuerdo con la Fiscalía Anticorrupción --firmado el 14 de diciembre de 2018--, la situación procesal de Belhot cambió de tener la condición de investigado a la de testigo y compareció por videoconferencia el pasado mes de enero desde su país "para evitar cualquier tipo de presión o intento de influencia por parte de las personas involucradas en los hechos".
En su declaración, Belhot admitió haber administrado unos ocho millones de euros ingresados en distintas etapas y haber entregado al exjefe del Consell unos 2,3 millones a largo de los siete años de "colaboración" mantenida con él, la mayoría de ellos entre 2016 y 2017.
Además, firmó un documento en el que manifestó que gestionó como abogado parte del patrimonio de Zaplana en el extranjero a través de los investigados Joaquín Miguel Barceló (considerado su presunto testaferro) y Francisco Grau (asesor) y procedentes de sociedades creadas por quienes abonaron presuntamente los sobornos, el empresario Vicente Cotino y su hermano, el expresidente de Les Corts y exvicepresidente del Consell con el PP, Juan Cotino.
La magistrada instructora del caso Erial dejó en libertad el pasado mes de febrero a Zaplana y a sus dos presuntos testaferros una vez aseguró esa cantidad de dinero que tenían en el extranjero --con su bloqueo, lo que minimizaba el riesgo de fuga--.
ZAPLANA, FIGURA "PROTAGÓNICA"
En su declaración, Belhot explicó también que conoció a Zaplana en 2009 y que le pareció una persona interesante con "contactos a nivel internacional" y que le habló tanto de Barceló como de Grau. Comentaron que este último había montado una estructura societaria en España y Luxemburgo llamada Imison Internacional, de la que hubo posteriormente un traspaso a dos sociedades uruguayas, Disfey y Misfey.
Ese traspaso lo decidió Zaplana, sobre quien Belhot dijo que llegó a darse cuenta con el tiempo de que era la figura "protagónica".