El colectivo trae desde América Latina su proceso de "memoria, verdad y justicia" con la esperanza de "ayudar" a otros descendientes
VALNCIA, 31 Jul. (EUROPA PRESS) -
El colectivo 'Historias Desobedientes' llega a España con el objetivo de encontrar a familiares de criminales de lesa humanidad que participaron en la represión de la dictadura franquista que condenen las actuaciones de sus allegados y recopilar sus testimonio para "ampliar el horizonte de la memoria". "No estamos solos", reivindican los 'desobedientes'.
En este sentido, el colectivo organizó esta semana un acto de presentación en Valncia, para dar a conocer las 'desobeciencias' de algunas mujeres que, al conocer que eran descendientes de criminales y torturadores de distintos regímenes dictatoriales, iniciaron un proceso de "memoria, verdad y justicia" con la esperanza de "ayudar" a otras personas.
La iniciativa cuenta con el apoyo de la Conselleria de Participación, Transparencia, Cooperación y Calidad Democrática, la Coordinadora d'Associacions per la Memoria Democtica del País Valenci, la plataforma Archivo, Guerra y Exilio y el Grup per la Recerca de la Memria Histrica de Castelló.
'Historias Desobedientes' es una organización surgida en Buenos Aires a principios de 2017 que está conformada por familiares de criminales de lesa humanidad de diversas dictaduras que "reconocen las atrocidades cometidas por sus propios familiares, las condenan abiertamente y se suman a la defensa de los derechos humanos, para restaurar la memoria silenciada de los pueblos".
Entre sus objetivos se encuentra colaborar con las organizaciones de derechos humanos y las asociaciones de víctimas y familiares, participar en actos centrados en la defensa y la profundización de los derechos humanos, desarrollar un trabajo de educación y concienciación en torno a la memoria, contribuir en los procesos contra los criminales de lesa humanidad y difundir sus testimonios.
"UNA CULPA QUE NO TENEMOS QUE HEREDAR"
Loreto Urraca es nieta de Pedro Urraca, conocido como 'el cazador de rojos', un policía franquista acusado de perseguir a los dirigentes políticos de la República que se refugiaron en Francia tras la guerra.
Ella descubrió en 2008, con más de 40 años, quién era su abuelo y, a partir de ese momento, comenzó "un camino para desafiliarse de este nombre" y "denunciar públicamente sus actuaciones". Por ello, escribió su libro 'Entre hienas' en el que repudia los hechos llevados a cabo por su familiar.
"Necesitaba expulsar la rabia y la vergüenza que tenía, por eso decidí escribir", expresa Loreto. Después de que la novela llevara publicada tres años, un argentino que vive en Barcelona y que había oído hablar de 'Historias Desobedientes', la puso en contacto con la también argentina Analía Kalinec, hija de un condenado a cadena perpetua por crímenes de lesa humanidad y fundadora del colectivo.
Loreto recuerda cómo sintió que "ya no estaba sola": "Al otro lado del Atlántico había tantas personas como yo, con esa necesidad de desvincularse de ese nombre que está tan manchado, de una culpa que no tenemos que heredar". "Cuando descubres que eres descendiente de un victimario franquista, repudias ese nombre e intentas desafiliarte de él", asevera.
Para ella, lo más importante es el "aspecto personal sentirse mal porque te encuentras que eres descendiente de un victimario franquista". "Es algo que nunca me ha hecho gracia", admite antes de hacer un llamamiento a todos aquellos descendientes de criminales de lesa humanidad en la dictadura de Franco que quieran unirse al colectivo. "Es una cuestión de ayuda entre nosotros", concluye.
ANALÍA, 'HISTORIAS DESOBEDIENTES' DESDE ARGENTINA
Por su parte, Analía Kalinec, actual presidenta y una de las fundadoras de 'Historias Desobedientes', cuenta que esta organización surgió para rechazar "las décadas de impunidad en Argentina con la imposición de unas leyes de obediencia de punto final que sucedieron al régimen de Videla".
Analía, nacida durante la dictadura, destaca que durante esos años su padre, más conocido como el Dr. K. y "responsable de secuestros, torturas, asesinatos y otros crímenes de lesa humanidad, no fue juzgado" y lamenta que ella "no tuvo registro" de su historia.
Con 25 años, descubrió "la vinculación de su padre con la dictadura militar". Aunque reconoce que en un primer momento pensó que "debía ser un error y se habían equivocado", cuando en el año 2008 la causa se elevó a juicio oral "tomó conciencia" de los crímenes cometidos "a partir de escuchar el testimonio de las víctimas". Su padre fue finalmente condenado a cadena perpetua por crímenes de lesa humanidad en el año 2010.
"Ahí se produce un quiebre existencial y también familiar con mi papá --ya en la cárcel-- y mis dos hermanas --ambas personal civil de la Policía Federal Argentina--", explica, al tiempo que añade que sus familiares iniciaron en 2015 un juicio civil para declararla indigna (una figura legal para evitar que pudiera heredar). "Esta demanda busca básicamente lastimarme e imponerme un castigo por no pensar como ellos", apunta.
La presidenta del colectivo denuncia que "esta lógica de pensamiento criminal entiende que hay que eliminar al que piensa diferente se sigue reproduciendo dentro de instituciones como las fuerzas armadas y de seguridad y se impone como cosmovisiones del mundo dentro de las familias de policías y militares argentinas".
VERÓNICA, 'HISTORIAS DESOBEDIENTES' DESDE CHILE
Verónica Estay representa las 'Historias Desobedientes' chilenas y es sobrina de Miguel Estay, más conocido como 'El Fanta', un responsable de crímenes de lesa humanidad durante la dictadura de Pinochet que fue condenado a cadena perpetua y murió en 2021 en prisión.
Además, Verónica es hija de supervivientes de la dictadura, por lo que afirma que se unió al colectivo por "tener esa doble relación". Resalta que desde la organización "se trabaja en cada país en líneas de acción e iniciativas determinadas".
En este sentido, indica que, "mientras que en Chile se trabaja por la nueva Constitución, en Argentina se lucha para que los familiares puedan dar testimonio contra sus padres y que este sea tomado en cuenta en los tribunales, porque actualmente hay una ley que lo impide".