El alcalde asegura que le han descrito lo sucedido "como un terremoto"
ALICANTE, 28 Nov. (EUROPA PRESS) -
Vecinos de Ibi (Alicante) y autoridades han guardado este jueves tres minutos de silencio a las puertas del Ayuntamiento de la localidad en memoria de los tres trabajadores fallecidos tras la explosión de una caldera en una nave de la empresa Industrias Climber SA en el polígono industrial.
Al homenaje han asistido el alcalde del municipio, Sergio Carrasco, junto a otros miembros de la corporación municipal, acompañados del subdelegado del Gobierno en la Comunitat Valenciana, Juan Antonio Nieves; el presidente de la Diputación de Alicante, Toni Pérez, y la alcaldesa de Xixona, Isabel López, ya que en este municipio residía una de las víctimas mortales.
En declaraciones a los medios de comunicación después del acto, el primer edil de Ibi ha detallado que la "preocupación principal" es estar al lado de las familias de las víctimas y seguir la evolución de los tres heridos más graves. En el siniestro, perdieron la vida tres trabajadores y siete personas resultaron herdias de diversa consideración, de las que cuatro han recibido el alta.
El alcalde ha sostenido que no es momento para determinar si el Ayuntamiento debe emprender alguna acción por lo ocurrido y ha pedido "dejar trabajar a la Policía Judicial, que se está haciendo cargo de la investigación" sobre la explosión.
"COMO UN TERREMOTO"
Carrasco ha apuntado que la gerente de una empresa cercana a la siniestrada le ha descrito la explosión "como un terremoto" y que esta compañía afortunadamente no registró daños "porque es de hormigón fuerte".
Sin embargo, uno de los fallecidos se registró en una empresa contigua a Climber, en Ibipal, donde un camionero perdió la vida tras ser golpeado en la cabeza por una piedra desprendida de una pared a raíz de la explosión.
"PÉRDIDAS IRREPARABLES"
Por su parte, el presidente de la Diputación ha manifestado que la institución provincial "está acompañando al pueblo de Ibi en estos momentos de dolor, ante unas pérdidas irreparables". "Mostramos el sentimiento de toda la provincia de Alicante para, en la medida de lo posible, paliar los efectos de lo ocurrido", ha agregado.
El Ayuntamiento del municipio alicantino de Xixona también ha decretado dos días de luto por el fallecimiento de uno de sus vecinos y ha informado de que las banderas ondearán a media asta durante este jueves y viernes. El consistorio ha trasladado las condolencias a la familia de la víctima y a la ciudadanía, según ha indicado a través de una publicación en Facebook.
HERIDOS
Dos de los heridos ya han recibido el alta, mientras que continúan ingresados otros tres con pronóstico reservado: los trasladados al hospital Doctor Balmis de Alicante y a La Fe de València y uno de los tres remitidos al hospital de Alcoy, según ha informado el Centro de Información y Coordinación de Urgencias (CICU).
Asimismo, otras dos mujeres de 21 y 25 años sufrieron heridas leves y fueron trasladadas al centro de salud en una ambulancia de Soporte Vital Básico (SVB).
Los hechos sucedieron sobre las 12.00 horas en una empresa de la calle Murcia de un polígono de Ibi al explotar una caldera que colapsó parte de la fábrica, del techo y de los muros de la empresa.
Como consecuencia de estos hechos, varias personas que se encontraban en la nave, concretamente tres, quedaron atrapadas por los escombros, según el Consorcio Provincial de Bomberos. Parte del techo salió despedido por la explosión y llegó a impactar en la nave anexa.
El Centro de Coordinación de Emergencias (CCE) activó el Plan Territorial de Emergencias de la Comunitat Valenciana en el municipio y estableció la situación cero, es decir, aquella en la que se producen daños muy localizados y en la que, para su control, es suficiente la activación y aplicación de un plan de ámbito local (municipal o supramunicipal).
En declaraciones a los medios de comunicación desde el lugar de los hechos, la delegada del Gobierno en la Comunitat Valenciana, Pilar Bernabé, confirmó que dos de los trabajadores fallecidos pertenecen a Climber, donde se produjo el siniestro, y otro a la compañía contigua Ibipal. Los empleados hicieron una cadena humana para retirar los escombros de la primera de las empresas.
Ante el siniestro, Cruz Roja movilizó hasta la empresa afectada un Equipo de Respuesta Inmediata en Emergencias de Intervención Psicosocial para atender a los familiares y allegados de las personas afectadas por la explosión.
La empresa siniestrada está dedicada a la fabricación de envases y embalajes por moldeo de Poliestireno Expandido y, en el momento de la explosión, tenía 39 empleados dentro de las instalaciones. Por su parte, la nave contigua, Ibipal, fabrica y recicla palets. La unidad orgánica de Policía Judicial de la Guardia Civil asumió la investigación del siniestro.