Los valencianos dedican una media de 4 horas y 19 minutos al día a su móvil, 41 minutos más que el año anterior
VALNCIA, 16 Ago. (EUROPA PRESS) -
Más de 848.800 valencianos se consideran adictos al móvil, o lo que es lo mismo, el 28% de la población de entre 20 y 64 años, lo que supone un incremento del 30% con respecto a la registrada en 2018, según se desprende de la V Edición del Estudio sobre Adicción al Móvil, elaborado por Rastreator.com (www.rastreator.com), que analiza el comportamiento de los españoles frente al teléfono móvil.
En cuanto al consumo de horas frente al móvil por regiones, los andaluces (4 horas y 50 minutos), madrileños (4 horas y 40 minutos) y canarios (4 horas y 39 minutos) son los que más tiempo invierten. Por el contrario, vascos (3 horas y 47 minutos), aragoneses (3 horas y 34 minutos) y asturianos (3 horas y 19 minutos) son los que se sitúan como los que menos horas lo usan.
El análisis desvela que los valencianos usan cada vez más el smartphone, una media de 4 horas y 19 minutos diarios, 41 minutos más que en 2018. Además, cinco de cada diez valencianos reconocen que lo primero y lo último que hacen cada día es mirar su teléfono, y un 24% asegura estar pegado a su teléfono durante más de cinco horas diarias.
Asimismo, 363.000 valencianos (12%) aseguran que no podrían estar más de una hora sin su móvil. En cuanto al tipo de actividad que se realiza con los smartphones, el uso más extendido en la comunidad es el de la realización de llamadas telefónicas (20%), por encima de el de consultar las redes sociales (19%), o la gestión del correo electrónico (13%).
Estas cifras evidencian que en nuestro país existe una dependencia creciente de los dispositivos móviles que, en algunos casos, puede derivar en problemas graves como la adicción. Durante el periodo de vacaciones, con un mayor espacio para el ocio, este riesgo se eleva.
Según el director de desarrollo de negocio de Rastreator.com, Álvaro Bas, "la constante conexión y el acceso a la información que proporcionan los teléfonos inteligentes ha convertido estos dispositivos en un imprescindible para millones de usuarios".
De hecho, "la tasa de penetración sigue creciendo en España, alcanzando el 96% de cuota de mercado. Este uso masivo conlleva cambios de hábitos que no siempre son positivos, como es el caso de la falta de desconexión o de socialización. En el caso de los valencianos, el 54% afirma que necesita estar conectado cuando viaja y casi la mitad de los encuestados (39%) asegura que no se despega de su teléfono, ya que publica fotos de sus viajes en sus redes sociales durante el período vacacional", ha agregado.
A pesar de esta situación, son muchos los encuestados que reconocen que les gustaría reducir su tiempo de uso del móvil, pero no saben cómo hacerlo (29%).
CONSEJOS PARA NO CAER EN LA ADICCIÓN AL MÓVIL
Daniel Peña, doctor en Psicología y Ciencias de la Conducta y experto en adicciones a las nuevas tecnologías, traslada unos consejos sencillos pero útiles a la hora de intentar combatir esta adicción tan extendida entre los españoles.
El primero es conocerse a uno mismo. La inseguridad, falta de confianza en nosotros mismos, vulnerabilidad emocional o la necesidad excesiva de aprobación por los otros pueden hacernos más propensos a hacer un uso abusivo del móvil. Conocer estar características y saber cómo influyen en nuestro comportamiento es el primer paso para recuperar el control, explica el experto.
En segundo lugar, recomienda marcar períodos con y sin teléfono, eso es, establecer períodos específicos y determinados para revisar el móvil y momentos y actividades en los que el móvil esté prohibido. "No te centres solo en lo que no debes hacer, sino en qué vas a invertir tu tiempo en vez de mirar el móvil", aconseja.
También señala la importancia de conocer los desencadenantes. "Hay situaciones externas (sociales) o internas (estrés, aburrimiento...) que desencadenan nuestro comportamiento, hábitos tóxicos que nos hacen estar pendientes del móvil sin ser necesario. Un eslabón inicial puede disparar el siguiente, por lo que el autocontrol es mucho más fácil en los eslabones iniciales", avisa.
Igualmente apunta a controlar la atención, es decir, "el objetivo mediante el que percibimos el mundo, un filtro que determina la porción del mundo con la que establecemos contacto. Sentimos y reaccionamos a esa parte del mundo y en ocasiones ese filtro se establece como consecuencia de emociones (por ejemplo el miedo) y no por nuestros objetivos, metas, valores", explica. Para ello, "el mindfulness es una excelente forma de entrenar la atención", asegura.
Finalmente, el doctor insta a aplicar la racionalidad. A veces el uso del móvil obedece a patrones irracionales de pensamiento como el miedo a perderse algo o a quedarse fuera (FOMO). "En estos casos es importante reanalizar nuestra forma de pensar e interpretar la realidad, tratando de hacerla más racional, autónoma y menos dramática", concluye.