VALNCIA 24 Jun. (EUROPA PRESS) -
El 'president' de Les Corts Valencianes, Enric Morera, ha participado este mediodía en una reunión telemática convocada por el Comité Europeo de las Regiones, para dar a conocer las conclusiones de la Conferencia sobre el futuro de Europa, un foro en el que el parlamento valenciano también ha participado a través de la Conferencia de Asambleas Legislativas Regionales de Europa (CALRE).
Se abre ahora el turno a las instituciones europeas (Parlamento, Consejo y Comisión) para que analicen las propuestas de reforma de la UE y, en este sentido, Morera considera que en esta fase "las instituciones europeas deberían de realizar un esfuerzo notable para implicar más a la ciudadanía en esta reflexión para fortalecer Europa, ya que una conferencia tan importante como la que se ha hecho no ha trascendido más allá del ámbito político y es necesario que la sociedad civil analice las propuestas, las mejore y haga sus propias aportaciones".
Para el 'president' Morera, "se ha culminado un gran trabajo de reflexión sobre las ideas que han de inspirar la Unión Europea del próximo futuro", recoge el parlamento valenciano en un comunicado.
"Les Corts Valencianes hemos estado presentes en este proceso, defiendo los principios de la igualdad, de lucha contra el cambio climático, para continuar avanzando en bienestar y en prosperidad todos los pueblos europeos y cooperando con otros estados para hacer un mundo más justo y solidario", ha remarcado Morera.
MÁS DE 300 MEDIDAS PARA FORTALECER EUROPA
Esta Conferencia sobre el futuro europeo aprobó un documento de 56 páginas con 49 propuestas de carácter general subdivididas, a su vez, en 325 medidas o sugerencias concretas de reforma.
En total, las propuestas se agrupan en torno a nueve bloques temáticos: cambio climático y medio ambiente; salud; economía, justicia social y empleo; la Unión en el mundo; valores y derechos, Estado de derecho y seguridad; transformación digital; democracia europea; migración; educación, cultura, juventud y deporte.
Las conclusiones concentran sus propuestas en tres dimensiones: por un lado, el desarrollo acentuado de políticas que ya están en los Tratados, como por ejemplo, clima y medio ambiente, agricultura, economía, competitividad, salud, justicia social, empleo, migración, educación, cultura, juventud y deporte. En segundo lugar, en las conclusiones de la Conferencia se insiste en la necesidad de la participación ciudadana en todos los niveles y ámbitos posibles de la acción de la UE; al lado de la exigencia, también general, de mayor transparencia. Participación de ciudadanos en general, de los jóvenes, de las mujeres, pero también de los actores sociales, de organizaciones no gubernamentales, y de los diferentes niveles de gobierno, nacional, regional y local.
En tercer lugar, las conclusiones de la Conferencia, basan la profundización en el carácter democrático de la Unión en el fortalecimiento de la participación de otros sujetos en su proceso decisorio y en su estructura institucional, donde siempre se ha defendido desde CALRE la participación activa en la toma de decisiones que afectan a todos los territorios europeos de los parlamentos y cámaras legislativas no estatales existentes en toda la Unión.
Por ello, el documento hace una reafirmación del principio de subsidiariedad, incluido como un apartado separado dentro del boque dedicado a la democracia europea. Así, se dice que "la subsidiariedad activa y la gobernanza multi-nivel son principios clave y características fundamentales para el funcionamiento de la UE y la rendición de cuentas democrática".
Algunas propuestas destacables se encuentran en el capítulo 5 (Valores y derechos), en el que se afirma que los valores y principios de la UE deben ser "condiciones no negociables, irreversibles y sine qua non para la adhesión a la UE", pero también para la permanencia en la misma y, en este sentido, se propone reforzar el mecanismo de control del Estado de derecho.
Y en el capítulo 7 (Democracia europea), se propone pasar de manera generalizada al uso de la mayoría cualificada, abandonando la exigencia de la unanimidad en sectores clave; dotar de iniciativa legislativa al Parlamento Europeo; o introducir las listas transnacionales para la elección de sus miembros (cosa que el propio Parlamento Europeo acaba de proponer también en su Resolución de 3 de mayo de 2022).