VALÈNCIA, 19 Oct. (EUROPA PRESS) - La vicepresidenta de la Generalitat Valenciana, Mónica Oltra, ha asegurado este jueves que denunciará el escrache que padeció en la noche del miércoles en su casa por parte de un grupo de extrema derecha, un "episodio de intento de intimidación por parte de unos fascistas", ha dicho, que no tienen cabida en la democracia. "Ayer vinieron a por mí, pero mañana pueden ir a por cualquiera; si no frenamos al fascismo, al final se apodera de todo y, lamentablemente, en la historia hay ejemplos de esto", ha advertido. Así se ha pronunciado Oltra en declaraciones a los medios a las puertas de las Corts Valencianes, donde se celebra la sesión de control al presidente de la Generalitat, en las que ha explicado cómo vivió ese escrache, que a su juicio tenía un mensaje claro: "Sabemos dónde vives y sabemos dónde está tu familia, es un mensaje intimidatorio de que yo sepa que nos pueden hacer daño". Oltra ha explicado que un grupo de "fascistas" se plantó en la puerta de su casa con máscaras tapándose la cara y en un principio pensaron que "tenía que ver con Halloween" y, de hecho, hizo un comentario a su hijo sobre cuánto se estaba adelantando esta fiesta. No obstante, ha proseguido: "No fue Halloween, cuando empezaron a desplegar la bandera española y a poner el himno y a Manolo Escobar me di cuenta de que era un acto intimidatorio de los fascistas". Así, apartó a sus hijos de la ventana y apagó las luces. Ha lamentado que hay "una serie de personas vinculadas a la ideología fascista que se creen con derecho a amenazar o a intimidar a otros simplemente porque no les gusta cómo piensan y esto en democracia no cabe". "En democracia caben todos los pensamientos y la expresión libre y pacífica de esos pensamientos pero lo que no cabe es la amenaza o la intimidación, no caben los que se creen con derecho de amenazar, de agredir, de pegar a otros porque están en una ideología que no respeta la libertad de los demás". Su hijo mayor, ha relatado, le preguntó anoche si eso era la política, a lo que ella le respondió que no, pero a veces las personas libres tienen que defender sus derechos y libertades, dijo. "Intento educar demócratas en casa y lo que no quiero es que mis hijos tengan miedo; se han ido con la cabeza bien alta, les he dicho que la gente libre vamos por la calle con la cabeza bien alta", ha relatado. La vicepresidenta y coportavoz de Compromís ha lanzado un mensaje a los partidos políticos, recordando que "las aguas se dividen entre demócratas y no demócratas, ahí está la línea divisoria", y ha instado a realizar una reflexión colectiva para situarse en defensa de la libertad y la democracia: "Ningún partido tiene que alimentar y envalentonar al fascismo, cuando un partido político extrema sus declaraciones, cuando se sitúa en el extremismo político, lo que está haciendo es poner una diana y los fascistas lo que hacen con esa diana es disparar", ha remarcado. Preguntada sobre si interpondrá una denuncia, ha querido agradecer la labor de las fuerzas de seguridad, que se personaron enseguida en su casa y levantaron atestado, y ha asegurado que presentará denuncia en cuanto pueda formalizarla porque "esta es una de las cuestiones que no hay que tolerar" y hay que defenderse con las herramientas del Estado de Derecho porque se trata de un acto que "nada tiene que ver con la libre expresión o la reunión pacífica". En él participó, ha aseverado, una persona "muy conocida como José Luis Roberto, una persona peligrosa vinculada al fascismo en Valencia desde hace muchos años con unas conexiones terribles, no sólo ideológicas, sino también de otra índole". Y desde luego, ha agregado, ella va a proteger no sólo a su familia, sino "que todas las personas tenemos derecho a vivir en libertad, sin amenazas y sin intimidaciones". Mónica Oltra ha asegurado que el presidente, Ximo Puig, le llamó en cuanto tuvo conocimiento de lo ocurrido para darle ánimos y reiterarle la defensa de las libertades por parte del Consell, y también hizo lo propio el delegado del Gobierno, Juan Carlos Moragues, con quien tuvo "una conversación muy edificante". Ha explicado que llegaron a la conclusión de que "no había que ser tolerantes con los fascistas, que había que actuar de manera contundente contra los fascistas" en una cuestión "de demócratas frente a los que no son demócratas y no saben convivir en democracia". "En eso hemos coincidido, creo es algo positivo que las aguas se dividan por donde se tienen que dividir", ha subrayado. También ha recibido muestras de cariño de todos los partidos, ha dicho, para agradecer a continuación cada mensaje de apoyo: "Este es un momento para estar unidos para enfrentarnos a la violencia". Sobre si esta acción es un reflejo de la escalada de tensión política en las últimas semanas, la vicepresidenta y dirigente de Compromís ha lanzado un mensaje a los partidos pidiendo "que tengan cuidado de no contribuir a envalentonar al fascismo" porque "cuando se hacen determinadas identificaciones, cuando se radicaliza el mensaje, cuando se denigra a otro partido de manera que se le coloca en una posición en la que no está, lo que se está colocando es la diana para que el fascismo dispare". "Ningún partido tiene que alimentar y envalentonar al fascismo, cuando un partido político extrema sus declaraciones, cuando se sitúa en el extremismo político, lo que se está haciendo es poner una diana y los fascistas lo que hacen con esa diana es disparar", ha incidido Oltra, que ha instado a reflexionar sobre la contribución de cada uno en este sentido. Mónica Oltra sufre un escrache en su casa por parte de un grupo de extrema derecha https://t.co/ygVZbtypYr pic.twitter.com/cbv8dYuoBg