Oltra, sobre el objetivo de déficit: "No hay nada más injusto que aplicar la misma receta a situaciones desiguales"

VALENCIA 23 Dic. (EUROPA PRESS) -

La vicepresidenta y portavoz de la Generalitat, Mónica Oltra, ha criticado este viernes la decisión del Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF) de fijar el mismo objetivo de déficit para todas las comunidades. "No hay nada más injusto que aplicar la misma receta a situaciones desiguales", ha subrayado.

La también consellera de Igualdad y Políticas Inclusivas se ha expresado en estos términos en la rueda de prensa posterior al pleno del Consell, al ser preguntada por la decisión del Gobierno central de fijar para todas las comunidades un 0,6 por ciento de objetivo de déficit.

"No va a acabar el año sin que hable de Montoro en la rueda de prensa", ha bromeado Mónica Oltra, quien ha manifestado su "energía, compasión y cariño" al conseller de Hacienda y Modelo Económico, Vicent Soler, que "está lidiando con esto como un valiente".

Para Oltra, "aplicar medidas iguales a situaciones desiguales es profundamente injusto y genera diferencias muy grandes y muy injustas", y ha criticado que a la Comunitat se le aplican "los mismos criterios que a otras comunidades que no están infrafinanciadas".

Al respecto, ha advertido de que "es imposible que la Comunitat pueda cumplir los objetivos igual que una comunidad que tiene suficiencia financiera. Es de cajón de melón", ha resaltado. "Si no tenemos financiación para hacer frente a sanidad y educación, ¿cómo vamos a cumplir el objetivo de déficit?", se ha preguntado.

Además, ha alertado de que se entra en "un círculo vicioso", dado que "como no cumplimos el déficit, nos penalizan y tenemos menos oportunidades de cumplir el déficit". "Es como el que no tiene casa y le ponen multas por vivir en la calle", ha indicado.

Oltra ha puntualizado que el anterior Consell del PP dejó el déficit de la Comunitat en el 2,59 por ciento, y que el Gobierno del Botànic lo tiene en el 1,4 por ciento, pero "es imposible que podamos cumplir con un 0,6 por ciento". O si no, ha añadido, "que venga aquí el señor Montoro, se siente delante de ustedes, y haga la lista de niños que hay que sacar de los colegios o de pacientes que hay que sacar de los hospitales".

Inquirida por el voto en contra de la Comunitat al techo de déficit en el CPFF, la vicepresidenta ha dicho que "no es casual" que las que votaran en contra fuera Baleares y la autonomía valenciana, dos de las cuatro regiones de la Cuenca Mediterránea, que son las que "están sufriendo la infrafinanciación y el maltrato".

Así, ha dicho que "lo lógico es votar en contra", porque "no es posible que asumamos ese acuerdo", y ha hecho hincapié en que "es una posición de Consell, no de partido".

Preguntada por la posición contraria de algunas autonomías a que se fije un déficit asimétrico, Mónica Oltra ha respondido que las comunidades que se niegan es "porque están mejor", y ha criticado que a la Comunitat le perjudica esta "defensa del status quo". En su opinión, "el que diga que no quiere asimetría es que no ve lo que pasa".

"LA FINANCIACIÓN ES ASIMÉTRICA"

Oltra se ha preguntado por qué si "la financiación es asimétrica, las consecuencias de déficit que tiene la financiación no pueden ser asimétricas". "No hay nada mas injusto que aplicar la misma receta a dos situaciones desiguales", ha subrayado.

"Que nos hagan igual a todos en financiación", ha reclamado la consellera, quien ha indicado que no se trata de "pelearse" entre las autonomías, sino de lograr una distribución de los recursos "justa e igual". Del mismo modo, ha dicho que si a la Comunitat le dan "lo mismo que a Euskadi, cumplimos el déficit y pagamos todo".

Inquirida sobre cómo es posible que la Comunitat tenga la misma tasa de reposición con autonomías con el doble de empleados públicos por habitante, Oltra ha respondido: "No nos llega la camisa al cuello".

Ante esta situación, ha planteado "seguir sumando colectivos" a las reivindicaciones de la Generalitat, así como "intensificar la vehemencia y seguir haciendo pedagogía" para dejar de ser "una anomalía democrática".