VALENCIA 21 Dic. (EUROPA PRESS) -
La concejala del grupo municipal popular en el Ayuntamiento de Valencia Lourdes Bernal ha denunciado este miércoles que el equipo de gobierno, a falta de diez días para finalizar el año, "tiene pendiente invertir en los barrios 5.800.000 euros de los presupuestos participativos".
Bernal ha explicado en un comunicado, tras la última Comisión Informativa de Participación y después de preguntar al edil responsable del área Jordi Peris, que "del total de proyectos de inversiones en barrios, --66 según la relación facilitada por la Delegación de Participación Ciudadana-- "en las fechas que nos encontramos, únicamente se han finalizado las obras en 19 de los mismos, esto es, el 28,78 por cienti, entendemos que la escasa inversión realizada demuestra que el primer proceso participativo ha defraudado la expectativas de los vecinos."
La edil 'popular' ha lamentado que en el barrio de Patraix "de once proyectos votados por los ciudadanos en el pasado mes de marzo de 2016, únicamente se han finalizado obras de tres proyectos, lo que supone que del total presupuesto para dicho barrio 414.537 euros, solamente se han podido gastar 79.587 euros".
El mismo "escaso y decepcionante" nivel de ejecución e inversiones, ha declarado Bernal, se ha producido en el barrio de Extramurs, que "dispone de un presupuesto de 374.458 euros, para ejecutar cinco proyectos votados por los ciudadanos de este barrio, y a fecha de hoy tan solo se han ejecutado dos proyectos por importe de 100.000 euros".
El caso más "doloroso" de este "farragoso y decepcionante" proceso participativo, ha destacado, "se está produciendo en el distrito de Camins al Grau, que cuenta con un presupuesto de 468.966 eyris y a fecha del pasado jueves, según la información facilitada, no se ha finalizado y ejecutado ninguna obra de inversión en el barrio y, en consecuencia, del total del presupuesto consignado no se ha gastado un solo euro".
La edil del PP ha calificado de "totalmente insatisfactorio este resultado", y ha recordado lo que ha venido denunciando a lo largo de todo el año sobre el primer proceso participativo "impuesto por el tripartito, la falta de previsión y de coordinación entre delegaciones de los distintos partidos políticos que conforman el gobierno municipal de izquierdas, fundamentalmente porque ninguno de los tres quiere perder protagonismo político y que se beneficie uno de los socios más que otro, un marcaje político "en corto" que están desvelando la ausencia de agilidad en el proceso, y lo que es peor, el perjuicio y la decepción que están sufriendo los valencianos a la hora de ver cumplidas sus propuestas."