VALNCIA, 21 Mar. (EUROPA PRESS) -
Organizaciones y colectivos contra el racismo, entre ellas la plataforma Crida contra el Racisme i el Feixisme, han celebrado este domingo en Valncia una protesta en la que han denunciado "el auge de los discursos de odio que criminalizan a las personas migrantes" y han exigido el cierre de los Centros de Internamiento de Extranjeros (CIE), así como la derogación de la ley de Extranjería, que han calificado de "piedra angular del racismo institucional".
En el marco del Día Internacional contra el Racismo, los asistentes a la concentración han mostrado pancartas con mensajes como 'Per una Valncia lliure d'odi' ('Por una Valncia libre de odio') y, en un manifiesto, han denunciado las "políticas racistas" y el racismo que experimentan "diariamente". Además, han mostrado unos carteles circulares de colores a la vez que proclamaban la consigna "contra tu odio, nuestros colores".
Los colectivos ha pedido la derogación "inmediata" de la Ley de Extranjería, una norma que, a su juicio, "condena a miles de personas migrantes a una situación inadmisible de exclusión social, potenciada por la imposibilidad de trabajar con garantías por un periodo mínimo de tres años".
La portavoz de la Plataforma Crida contra el Racisme i el Feixisme, Ángela Pedraza, en declaraciones a los medios, ha lamentado que la política de extranjería "condena a las personas en situación administrativa irregular a no tener papeles y no poder conseguir un trabajo en condiciones". "Estás más expuesto a la explotación laboral, la precarización y a no tener una serie de derechos", ha alertado.
Asimismo, ha censurado "las políticas municipales que obstruyen el acceso al padrón a muchas personas en situación de especial vulnerabilidad e impiden el ejercicio de sus derechos fundamentales, como el derecho a la salud o al acceso a los servicios municipales".
Por su parte, el integrante de Crida contra el Racisme Arturo Borro ha apuntado que, "al no poder empadronarse, muchas personas no pueden ser demandantes de los servicios municipales, incluidas las ayudas económicas más básicas ante una crisis pandémica que nos ha afectado a todos de formas desiguales".
"CÁRCELES RACISTAS"
La concentración ha exigido el cierre de los CIE, lugares que ha calificado de "cárceles racistas" donde las personas migrantes "son encerradas sin haber cometido ningún delito". Asimismo, ha denunciado que las políticas de fronteras de la Unión Europea "son responsables directas del sufrimiento y la muerte de miles de personas que huyen de la guerra, la persecución política o religiosa, el hambre o el cambio climático".
En esta línea, los participantes han condenado "las políticas represivas que agreden principalmente a las poblaciones racializadas y las someten al señalamiento, la estigmatización social, la violencia y la expulsión", así como "las redadas racistas por perfil racial o étnico, el trato denigrante que reciben las personas en frontera y el abandono que sufren los menores no acompañados".
"Denunciamos la falta de una política de asilo capaz de acoger a las personas que se desplazan de manera forzosa de sus países y el incumplimiento recurrente de los acuerdos europeos relativos a las cuotas de acogida de personas en situación de indefensión", han señalado durante la lectura del manifiesto.
Por otra parte, han resaltado que la pandemia "ha hecho más visible la importancia de los trabajos que realizan las mujeres racializadas dentro y fuera de casa" y han advertido de "un aumento de la precariedad de las trabajadoras del campo, sexuales, de los cuidados y de las víctimas de tráfico y trata, sometidas a trabajo esclavo o denigrante con despidos y sin derecho a paro".
"Las mujeres trabajadoras del hogar y los cuidados han estado sin poder cobrar prestación de desempleo porque son discriminadas simplemente por realizar ese trabajo y ni siquiera han podido solicitar apoyo por parte del ayuntamiento o las instituciones públicas por estar en una situación irregular", han aseverado.
POLÍTICAS "REALES" CONTRA EL RACISMO
La portavoz de la plataforma ha reivindicado la existencia de políticas que "avancen contra el racismo estructural e institucional, que condena a las personas migrantes y racializadas". "Nos preocupa que frente a los discursos de odio de los partidos de extrema derecha, otros sectores políticos no son capaces de contrarrestarlos porque piensan que los migrantes no damos votos", ha declarado.
Así, ha defendido que los políticos "tienen que actuar con políticas reales que garanticen el acceso a los derechos de todas las personas y frenen los discursos de odio". "Y cada uno de nosotros tenemos que dejar de mirar a un lado y luchar contra las actitudes racistas en la cotidianeidad", ha apostillado.
"No basta con no ser racistas, sino que hay que practicar el antirracismo. Se trata de defender los derechos de las otras personas con independencias de su raza, su color de piel o su etnia", ha añadido.
Finalmente, la integrante de la Federación Africana Toulouse Niang ha denunciado que "los gobiernos hacen negocio con las personas migrantes", al tiempo que ha remarcado que "ayudar a las personas migrantes es que se puedan quedar en su país y trabajar, no que la ayuda que quede en manos de las instituciones". "Si las instituciones quieren ayudarnos de verdad, sin negocio ni provecho, hay muchos proyectos para que nosotros podamos quedarnos en nuestros países y tener una vida digna", ha concluido.