Una protesta de época denuncia que la línea València-Zaragoza "no ha mejorado en un siglo"

La plataforma Teruel Existe exige que el Corredor Cantábrico-Mediterráneo "sea una realidad ya" y critica los retrasos

VALÈNCIA, 1 Abr. (EUROPA PRESS) -

Más de un centenar de personas se han concentrado este sábado vestidos con trajes de época a las puertas de la Estació del Nord de València para denunciar que la línea de ferrocarril Valencia-Sagunto-Teruel-Zaragoza "no ha mejorado desde su puesta en marcha al inicio del siglo XX" y poner de relieve que el Corredor Cantábrico-Mediterráneo "debe ser una realidad ya" y que no aceptarán más retrasos.

La protesta ha sido convocada por la plataforma Teruel Existe y ha recibido el apoyo de otras entidades sociales y vecinales tanto aragonesas como valencianas, como la Federación de Vecinos de Valencia, Cave-Cova o la CEAV, así como el Ayuntamiento de València y Ciudadanos, según ha informado la organización vecinal en un comunicado.

Como si de un viaje en el tiempo se tratara, un centenar de turolenses han llegado en autobús a la plaza del Ayuntamiento ataviados con trajes de principios del siglo XX, con el objetivo de "poner en evidencia que, desde la puesta en marcha de la línea ferroviaria Zaragoza-Teruel-Sagunto-Valencia en aquella época, no se ha acometido ninguna inversión para modernizarla y adecuarla a las necesidades actuales".

De hecho, aseguran que para llegar a Zaragoza en tren es más rápido hacerlo vía Madrid (cuatro horas) que de forma directa (cinco horas y 15 minutos), por lo que subrayan la importancia del Corredor Cantábrico-Mediterráneo: "Enlaza seis comunidades que suponen un 21,9% del Producto Interior Bruto (PIB) nacional y el 33,4% de la población española".

A su llegada, la comitiva ha sido recibida por el alcalde, Joan Ribó, y por el portavoz del Ciudadanos en el Ayuntamiento, Fernando Giner, que se han sumado a la reivindicación. También ha asistido el director territorial de Presidencia de la Generalitat, Francisco Molina.

Tras una recepción en el Salón de Cristal del Consistorio, los manifestantes se han trasladado a la explanada exterior de la Estación del Norte, donde se ha leído un manifiesto y después han cogido un tren para llevar la protesta a Zaragoza.

"TRES HORAS MÁS QUE HACE 100 AÑOS"

En la concentración en València, el portavoz de Teruel Existe, Manuel Gimeno, ha subrayado que la reivindicación de la modernización de este eje ferroviario que supone parte del Corredor Cantábrico-Mediterráneo "no es gratuita".

Como ejemplo, ha indicado que al estado de "abandono y deterioro" del eje Valencia-Zaragoza, se une que "actualmente los trenes de mercancías tardan tres horas más que hace un siglo en hacer su recorrido y que tan solo pueden pasar dos trenes a la semana".

Así, según él, el viaje para pasajeros València-Teruel-Zaragoza (308 kilómetros) cuesta actualmente cinco horas y 15 minutos (58,7 km por hora de media), mientras viajar de València a Zaragoza vía Madrid (705 kilómetros) supone cuatro horas (176,2 km por hora de media).

Otro portavoz de la plataforma aragonesa, Miguel Ángel Fortea, ha exigido que el Corredor Cantábrico-Mediterráneo pase por Teruel porque "es una promesa que se hizo en su día y llevamos demasiado tiempo esperando el cumplimiento".

Al respecto, la presidenta de la Federación de Vecinos, María José Broseta, ha exigido que "el Corredor Cantábrico-Mediterráneo por Teruel no sea una utopía y sea una realidad, pero ya, porque ya ha tenido demasiados retrasos". "Hay que apoyarse unas comunidades con otras porque es una necesidad primordial para las mercancías, pero también para que las personas se puedan desplazar en condiciones dignas y con seguridad", ha reivindicado.

"COMPLEMENTARIO" AL CORREDOR MEDITERRÁNEO

A nivel político, el portavoz de Ciudadanos en el Ayuntamietno, Fernando Giner, ha asegurado que esta infraestructura que enlaza el este de España con el norte "es complementaria al Corredor Mediterráneo". A lo largo de del trayecto, los portavoces y representantes de Cs en Teruel y Zaragoza se han sumado a la protesta.

"Los problemas de infraestructuras son problemas de España y de todos los españoles", ha manifestado, por lo que cree que su mejora contribuiría a aumentar la actividad económica de las empresas, ante lo que ha subrayado que "cuando mejora la productividad de las empresas, mejora la calidad de vida de las familias y las personas".