VALÈNCIA 20 Dic. (EUROPA PRESS) -
El presidente de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig, ha afirmado este miércoles, después de que el Tribunal de Justicia de la Unión Europea haya desestimado el recurso de España contra la multa de casi 19 millones de euros impuesta por la manipulación de las estadísticas de déficit y deuda en la Comunitat Valenciana durante más de 20 años y que se corrigieron en 2012, que "es la herencia que nunca acaba, la situación a la que nos llevó el PP con unas políticas absolutamente fuera de cualquier marco razonable".
En declaraciones a los medios en el Palau, el jefe del Consell ha lamentado que "desgraciadamente" la Comunitat Valenciana ha sido "la única región directamente condenada por falsificar las cifras", aunque la multa como tal va dirigida al Reino de España.
Ha recordado que siempre ha defendido que esta multa debía pagarla el Gobierno central porque "fue cómplice de esta situación" pero ya se le ha cobrado a la Comunitat. Hemos pagado esos 19 millones de consecuencias que hubieran podido ser cinco colegios, cinco centros de salud, pero las necesidades perentorias de la justicia nos hacen que hayamos tenido que pagar ya esta multa", ha agregado.
"Sería bueno que el Ministerio de Hacienda devolviera ese dinero porque la multa es al Gobierno", ha reiterado Puig, que preguntado sobre si piensa reclamar esta cantidad ha indicado que ya tiene abierta la "batalla" de la financiación autonómica: "Si fuera por 19 millones, ya llegaríamos a un arreglo".
Así, ha incidido en que "lo fundamental es que el Gobierno cumpla su palabra y diga antes de final de año al menos qué piensa hacer con el modelo de financiación".
También ha aprovechado para destacar que con el nuevo Consell se ha visto "el cambio de paradigma" en las relaciones con Bruselas y el actual Ejecutivo valenciano "se ha ganado la credibilidad frente al anterior, que lo único que hizo fue un auténtico desacato falsificando las cifras".