ALICANTE, 11 Dic. (EUROPA PRESS) -
Los restos mortales del jurista Rafael Altamira Crevea y de su esposa, Pilar Redondo Tejerina, fallecidos en los años 1951 y 1957, respectivamente, en México, donde se exiliaron tras el estallido de la Guerra Civil Española, descansan desde este miércoles en el cementerio municipal de El Campello (Alicante).
Los féretros se han trasladado desde el tanatorio de Sant Joan d'Alacant hasta el camposanto de esta localidad y se han depositado en el nicho familiar, donde permanecerán hasta que se construya un monumento funerario que acogerá los cuerpos de forma definitiva, "para cumplir el deseo del ilustre jurista", según ha informado el Ayuntamiento en un comunicado.
El depósito de los restos ha sido un acto íntimo, que ha contado con tres de los bisnietos del literato y humanista, Luz, Ignacio y Javier Ramos Altamira; el alcalde de El Campello, Juanjo Berenguer; el edil de Cementerio, Cristian Palomares, y Raimundo Panea, el técnico municipal encargado del expediente administrativo que ha posibilitado exhumar los cuerpos en el Panteón Español del camposanto de México DF para luego repatriarlos a España.
Los familiares de Altamira, después de ubicar los restos en pequeños féretros, han introducido ambas cajas en el nicho donde reposan desde hace muchos años los padres y abuelos del humanista.
Cuando ha finalizado la operación, se han depositado dos centros florales que ha ofrecido el Ayuntamiento "en nombre de todo el pueblo campellero".