VALÈNCIA, 8 Abr. (EUROPA PRESS) -
El sector turístico de la Comunitat Valenciana sufre en estos días "la peor crisis" de su historia como consecuencia de la pandemia del coronavirus que se ha extendido ya a nivel internacional. La vuelta a la actividad no se prevé inmediata, en el mejor de los casos, la oferta alojativa señala que se podría recuperar una mínima actividad a mediados de verano --en función de la evolución sanitaria-- aunque hasta dentro de un año, allá por la Semana Santa de 2021, no se espera una vuelta a la normalidad.
En cualquiera de los escenarios, las asociaciones del sector trabajan ya en el diseño de nuevos protocolos que van a "romper" con las grandes concentraciones de personas y que darán un "giro de 180 grados" a la actividad tal y como hoy se concibe, con medidas que contemplan desde una higiene extrema hasta medidas de protección o uso de instalaciones, entre otras muchas.
Así lo ha avanzado la secretaria general de la Asociación Empresarial Hostelera de Benidorm, Costa Blanca y Comunidad Valenciana (HOSBEC) Nuria Montes, en declaraciones a Europa Press. Según ha explicado, a su regreso, el sector incorporará "criterios hasta ahora nunca conocidos ni contemplados" con el objetivo de dar mayor seguridad.
Montes ha puesto de relieve que la crisis en el sector turístico se alargará "mucho más allá del estado de alarma". Como pronto, si no hay rebrotes de la enfermedad, a mediados del verano podría haber algunos turistas, en una primera fase, procedentes del mercado nacional que no necesita volar.
En todo caso, la mayoría de hoteles no va a poder operar inmediatamente por lo que reclaman poder prolongar los Expedientes de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) más tiempo, más meses, algo que el 'president' de la Generalitat, Ximo Puig, se comprometió esta semana a reclamar ante el Gobierno central.
Para los primeros turistas nacionales, quieren preparar "desde ya" campañas de promoción que inviten a viajar a Comunitat Valenciana, resaltando los "valores" que identifican al sector en la región, una de las que mejor está controlando la pandemia, ha resaltado Montes.
Para la demanda extranjera augura un "estancamiento importante" en una primera fase, tanto por la pandemia que se sufre también en otros países como por las restricciones que España pueda poner o el miedo inicial a salir del país.
Y mientras el turismo despierta, la responsable de Hosbec ha reclamado que, además de una prolongación de los ERTE para sus trabajadores, se tengan en cuenta otras particularidades del sector como su "estacionalidad" a la hora de tomar decisiones "lo antes posible".
Durante años, ha dicho, el sector turístico "no ha pedido nada nunca", ha sido "aportador neto" a las arcas de la sociedad. Ahora, es el momento de "devolverle" lo que ha dado todo este tiempo, ha defendido Montes.
En este sentido, ha reclamado también medidas como un aplazamiento de 12 meses de las cuotas de préstamos hipotecarios y arrendamientos o el aplazamiento "urgente" de pagos como el Impuesto de Sociedades que el próximo 20 de abril tendrán que pagar los establecimientos a cuenta de los beneficios de 2019. Este pago puede "descapitalizar" a muchas empresas del sector, ha advertido.
"APRETAR EL RESET"
En la misma línea, el presidente de la Asociación de empresas de apartamentos turísticos de la Costa Blanca, Miguel Ángel Sotillos, ha asegurado que el sector turístico es de "los primeros" que notó los efectos del Covid-19 y será "de los últimos" que deje de sufrirlos.
Cuando el estado de alarma finalice "los clientes serán cero" porque la salida será escalonada y poco a poco, habrá limitaciones y "miedo", y aunque por el momento no se están cancelando las reservas de julio, todo dependerá de la evolución de la situación sanitaria y de la "percepción del riesgo", ha apuntado.
De hecho, no espera que la situación se normalice, "apretar el reset" y reiniciar la temporada, al menos, hasta la próxima Semana Santa, el año que viene. La cuestión es cómo "sobrevivir estos once meses" hasta entonces, ha remarcado.
Desde su punto de vista, esta es sin duda, "la peor" de las cinco crisis que ha vivido porque en las demás la gente podía viajar pero en esta ocasión no se pueden ni bajar los precios y "ni quiere ni puede venir nadie" pero los costes se mantienen, ha lamentado.
Para Sotillos, dado que China va "por delante" en experiencia a la hora de enfrentarse al coronavirus, hay que "tomar nota" de lo que le ha funcionado y lo que no para aprovechar lo aprendido.