ALICANTE, 20 Nov. (EUROPA PRESS) -
La sección séptima de la Audiencia Provincial de Alicante ha condenado a un traficante de Torrevieja a tres años de prisión por un delito contra la salud pública y amenazas y le impone además el pago del veterinario al dueño de unos perros que se intoxicaron al morder el hachís que tiró cuando huía de la Guardia Civil.
Así consta en un sentencia de la sala, con sede en Elche, tras un juicio celebrado por conformidad y en el que el tribunal acordó la suspensión de la ejecución de las penas privativas de libertad durante un plazo de cinco años, condicionada a que no delinca en ese periodo de tiempo y a que se someta a un tratamiento de deshabituación del consumo de estupefacientes.
En la sentencia, con fecha del pasado 7 de noviembre, y que ha dado a conocer el Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana (TSJCV), la Audiencia ordena al condenado que se haga cargo de los 141 euros que costó el tratamiento veterinario de varios perros que se intoxicaron tras mordisquear el hachís que lanzó a una azotea cuando intentaba huir de los agentes.
Asimismo, deberá hacerse cargo de los 260 euros del coste de reparación de la ventana que tuvo que romper para acceder a la terraza en su intento de huida.
Los hechos ocurrieron en febrero de 2016 cuando el condenado amenazó de muerte con un cuchillo a una mujer, a la que reclamó una deuda. Esa misma tarde, la Guardia Civil acudió a su casa donde localizaron más de 40 gramos de cocaína y diferentes cantidades de resina de cannabis destinados a la venta.
El hombre fue localizado en la azotea del edificio, a la que accedió tras romper una ventana. Antes de ser detenido, arrojó una bolsa con más de 80 gramos de resina de cannabis, que mordisquearon varios perros que se encontraban en la terraza. Los animales sufrieron una intoxicación y necesitaron tratamiento veterinario.