El uso de los emoticonos es dispar y el más repetido es el del beso, según una Tesis

Emoticono beso
EUROPA PRESS
Publicado: lunes, 25 julio 2016 12:55

VALENCIA 25 Jul. (EUROPA PRESS) -

Una tesis leída en la Universitat de València recoge que los
usuarios se usan de forma "dispar y creativa" los emojis y solo utilizan una pequeña cantidad de éstos, principalmente las caritas, siendo el más común el del beso.

El trabajo, realizado por la doctora en Lingüística por la Universitat de València Agnese Sampietro, concluye que los emojis, la variante gráfica de los emoticonos, se utilizan de forma preferente en situaciones informales y contextos positivos.

Asimismo apunta que ya han superado los límites de la pantalla, tienen una importante vertiente económica, y forman parte del paisaje iconográfico mundial no sólo en las redes sociales, sino también en la publicidad.

El estudio, titulado "Emoticonos y emojis. Análisis de su historia, difusión y uso en la comunicación digital actual", también analiza el fenómeno de los emojis y emoticonos desde la pragmalingüística, una sub-área de la lingüística que se interesa por cómo el contexto influye en la interpretación del significado.

Asi "el estudio confirma la percepción de la enorme popularidad de los emoticonos. Sin embargo, no se utilizan de una manera unívoca, sino de forma bastante creativa y dispar", ha afirmado Agnese Sampietro que ha subrayado que se entrevén indicios de convencionalización en su uso, si bien no existen normas estandarizadas y que los usuarios son bastante conservadores en la utilización de estas figuras.

La tesis de Agnese Sampietro, destaca como un de los aspectos más novedosos de la investigación que emoticonos y emojis confirman algunas tendencias sociales y culturales relacionadas con la comunicación digital y la cultura actual, como nuevas maneras de entender la creatividad, la noción de realismo de los informantes, así como los valores capaces de ser transmitidos por las nuevas tecnologías.

En su revisión de la bibliografía, Agnese Sampietro también ha identificado posibles antecedentes "analógicos" de las "caritas" que hoy en día se encuentran en la comunicación digital. Se trata de manifestaciones culturales típicamente japonesas como el manga, el anime y la poesía; o los poco conocidos juegos tipográficos de los editores en el siglo XVIII y XIX.

WHATSAPP

El trabajo, además, identifica las funciones de los emoticonos en la popular red WhatsApp donde "se utilizan para gestionar la conversación (por ejemplo, cuando cedemos el turno al interlocutor), o para aumentar la cortesía expresada verbalmente (enfatizando agradecimientos o en secuencias de cierre)". No obstante, raramente vehiculan contenidos emocionales y normalmente no se usan para sustituir palabras, sino que son más bien un añadido a mensajes cuyo contenido se expresa principalmente de forma verbal.

Otras funciones de los emoticonos detectadas en esta investigación son formas de cortesía, decoración del mensaje, señalar un tono informal o gestionar la conversación. "En contadas ocasiones se utilizan emojis para sustituir palabras, a modo de "lenguaje visual -apunta Sampietro- y su uso raramente provoca malentendidos, gracias al anclaje verbal que tienen con el texto escrito al que se asocian", ha dicho.

"La metodología de análisis de los mensajes con emoticonos y emojis ha intentado combinar dos aproximaciones metodológicas. Por una parte el análisis del discurso mediado por ordenador, que aplica conceptos lingüísticos al análisis de corpus digitales; y por otra parte, la multimodalidad, una perspectiva de estudio reciente, que intenta dar una visión global de la comunicación, integrando incluso materiales no lingüísticos".

La parte empírica del trabajo se basa en dos investigaciones. Por una parte, una encuesta a 226 personas que analizó aspectos poco estudiados en la investigación sobre emoticonos, como las herramientas en las que se utilizan más las caritas, los contextos de uso preferentes y las posibles razones del gran éxito de los emoticonos gráficos.

También analiza el grado de acuerdo que mostraban los encuestados con respecto al significado que atribuirían a un conjunto de emoticonos, para valorar cómo podría funcionar su interpretación y la posible emergencia de significados convencionales. Se concluye que estas figuras no tienen un claro significado convencional entre sus usuarios.

Por otra parte, como fuente también se analizó un corpus de mensajes de WhatsApp reales, recogidos con la colaboración de 120 informantes. En esta segunda parte, Agnese Sampietro observó cómo se utilizan realmente los emoticonos en su contexto, desde la perspectiva de la multimodalidad y el análisis del discurso digital.