El viaje artístico de Zóbel, Teixidor e Yturralde confluye en una exposición en la Chirivella Soriano

Actualizado: martes, 5 abril 2016 16:35

VALENCIA 5 Abr. (EUROPA PRESS) -

La Fundación Chirivella Soriano inaugura la exposición 'La pintura, el viaje, la contemplación', en la que se encuentran 130 obras de los creadores Fernando Zóbel (1924-1984), Jordi Teixidor (1941) y José María Yturralde (1942) que reflejan su evolución desde la década de los sesenta hasta la actualidad. La muestra, que estará abierta al público hasta el 17 de junio, reúne pintura, escultura, obra gráfica, cuadernos de viaje y apuntes que evocan la "idea de ser transportado a la contemplación y reflexión".

La selección, patrocinada por Banca March, ha sido presentada este martes por los artistas Jordi Teixidor y José María Yturralde; el director general de Banca March y comisario de la exposición, José Luis Acea; el director de Exposiciones y Museos de la Fundación Juan March, Manuel Fontán; y el presidente de la Fundación Chirivella Soriano, Manuel Chirivella.

Las obras --procedentes de diversas colecciones, públicas y privadas, entre las que destacan las de la propia Fundación Chirivella Soriano y las del Museo de Arte Abstracto Español de Cuenca-- tienen como hilo conductor el equilibrio en la pintura de los tres artistas entre el viaje, el conocimiento del mundo y el carácter contemplativo de la pintura.

"Contemplar va más allá del mirar, supone un detenimiento del tiempo", ha asegurado Teixidor. "El mundo necesita de la belleza y la espiritualidad", ha continuado Yturralde.

La muestra recuerda el encuentro de los jóvenes Teixidor e Yturralde con Fernando Zóbel en la Cuenca de los años sesenta. De esta manera, la exposición presenta el equilibrio alcanzado por cada uno de sus protagonistas, y la "unión" de sus obras.

ENCUENTRO

En 1961 el pintor Fernando Zóbel se instaló definitivamente en España, en un momento en que el panorama cultural evidenciaba grandes carencias comparado con el internacional. Sin embargo, a Zóbel le sorprendió la calidad de las obras de la generación de pintores abstractos que aquí encontró, y comprobó que utilizaban el mismo lenguaje que muchos otros artistas coetáneos cuya obra había visto en centros de arte, galerías y museos europeos y norteamericanos.

Comenzó a comprar obras y, en el momento en que reunió una colección considerable, empezó a plantearse la idea de formar un museo dedicado al arte abstracto español. El 1 de julio de 1966, con la ayuda de Gustavo Torner, se inauguró en Cuenca el Museo de Arte Abstracto Español. Una de las primeras decisiones de Zóbel fue nombrar a Jordi Teixidor y José María Yturralde, en aquella época estudiantes de la Escuela Superior de Bellas Artes de San Carlos de Valencia, como los primeros conservadores agregados del museo.

El arte de los tres autores se reencuentra en la exposición en Valencia. Estructurado en dos salas, este itinerario arranca con los cuadernos de los tres artistas, desde el año 1966 hasta la actualidad, que marcan "los inicios" de su producción. "Son los típicos cuadernos de artistas que tomamos apuntes, posibilidades y proceso de la obra", ha manifestado Teixidor. Poco a poco, el resto de la exposición se adentra en el mundo de los autores, para terminar con las obras de Zóbel.

Teixidor ha comentado que en sus trabajos se puede encontrar una "insistencia clara en el negro", pero "muy sereno" que llevan a un "concepto de vacío", "para entender de otra manera la realidad", y hacer llegar a una "reflexión mejor que el cuadro".

A su vez, Yturralde asegura que, en la actualidad, "retoma el vacío de los 60". "Se trata de explorar nuevas visiones de lo que puede ser la pintura", ha manifestado. Asimismo, entiende el arte "como forma de conocimiento" para llegar a la "idea de trascendencia, esencia y profundidad".