MADRID 23 Abr. (EUROPA PRESS) -
Credit Suisse considera que la exposición concentrada en la zona euro de CaixaBank supone un riesgo para el negocio de la entidad, si bien da la bienvenida a los planes de reducción de costes que se saldarán con el despido de 8.291 personas, e incluso anticipa sinergias superiores a las avanzadas tras la fusión con Bankia.
En este sentido, la firma cree que sería un riesgo para CaixaBank que se produjera una nueva desaceleración en la recuperación económica europea, lo que podría deteriorar aún más su generación de ingresos.
No obstante, confía en que estos vientos de cara puedan compensarse en parte con el importante esfuerzo en ahorros del banco, que además del recorte de casi 8.300 empleos, supondrá el cierre de 1.534 sucursales.
En cualquier caso, Credit Suisse ha decidido adoptar una postura más cauta sobre CaixaBank, previo a la presentación de resultados que se producirá el próximo 6 de mayo y que incluirá por primera vez en su perímetro a Bankia.
De este modo, ha reducido la perspectiva que tenía sobre la entidad desde sobreponderar, hasta neutral, aunque ha mantenido el precio objetivo en 2,7 euros por acción.
Antes de que presente los resultados del primer trimestre de 2021, Credit Suisse destaca los desafíos a los que se enfrenta el banco en el sur de Europa en términos de ingresos por intereses, debido sobre todo al exceso de liquidez en medio de una demanda de crédito moderada, al bajo nivel en el que se encuentra el Euríbor y a la presión continua que se observa sobre los rendimientos de los préstamos en todos los segmentos.
En esta línea, asegura que el mercado está siendo "demasiado optimista" sobre las estimaciones de ingresos por intereses, añadiendo que en su caso prefiere ser más "cauto" y anticipar una mayor presión sobre esta variable.