SAN SEBASTIÁN, 22 Sep. (EUROPA PRESS) -
La sección Zabaltegi del Festival Internacional de Cine de San Sebastián presenta una de las cintas más curiosas de la 63 edición del festival: el documental 'The propaganda game', dirigido por Álvaro Longoria, en el que trata de desvelar la realidad social de Corea del Norte y sortear las fuertes restricciones del gobierno de Kim Jong Un para conocer la verdad del país.
"Corea del norte existe porque a los países de alrededor les conviene o porque es el mal menor", ha manifestado el director durante una entrevista concedida a Europa Press en el marco del festival donostiarra, en la que ha relatado la difícil epopeya que supuso conseguir rodar un documental en un país que controla toda la información.
Durante su estancia allí, Longoria no pasó solo ni un momento: las visitas siempre estaban programadas y en ellas iba acompañado. Tal y como ha señalado, el control es total y su presencia era considerada en un primer momento "hostil". "Un periodista extranjero es como un espía. Los primeros días sentí que me consideraban peligroso", ha señalado.
Uno de los aspectos que más le llamó la atención fue la mentalidad coreana, "extraña e incluso incomprensible" para los occidentales: "Tienen la idea de que son una gran familia feliz, que aparentemente tiene todo lo que necesitan". Sin embargo, en todo momento Longoria vio que existe un "guión claro" acerca de su aparente felicidad porque "todo el mundo respondía lo mismo". Además, las ONG y muchos periodistas se arriesgaba a perder su permiso de residencia si hablan con cualquier informador extranjero.
Según ha destacado Longoria, los dirigentes norcoreanos creen que "cualquier influencia externa puede contaminar el sistema y ellos dicen abiertamente que no quieren que la gente sepa que hay otro modo de vida". La propaganda les ha hecho pensar que sus lideres son venerados por el mundo entero, e incluso se jactan de no tener adictos a las drogas en el país porque no les dan la oportunidad de conocerlas.
Longoria reconoce que le atraen los sistemas alternativos, aquellos que no han funcionado, motivo que le llevo a viajar hasta este país. "Fue como mirar al pasado y realizar un viaje en el tiempo y ver Rusia o China en los años 50. No han cambiado mucho las cosas allí y no queda ningún otro sitio igual", ha contado.
Este es su segundo documental: su primera incursión en este género como director fue 'Hijos de las nubes', que recibió el Goya de aquel año en esa categoría. Ahora ya tiene entre manos una cinta que abordará la temática medioambiental. "¿Capitalismo? Ahí también veo un tema", ha dicho el director de 'The propaganda game', para quien todos estas excusas para realizar un documental giran en torno a lo mismo: "Dinero y estrategia".
ALEJANDRO CAO: UN COREANO ENTRE LAS ESTRELLAS
Personalidades del mundo del cine tales como Ricardo Darín, Javier Cámara o Álex e la Iglesia, concentrados en el Hotel María Cristina de San Sebastián, donde tienen lugar estos días los encuentros con los periodistas, miraban con extrañeza y estupefacción a un individuo vestido con traje militar que caminaba por los pasillos y que condecía entrevistas a la prensa especializada en cine acreditada en el festival.
Su nombre es Alejandro Cao de Benós y se define a sí mismo como delegado especial para el comité de relaciones culturales del gobierno de la República Democrática Popular de Corea, un cargo que asegura haber obtenido en 2002. "Lo que hago es actuar como puente entre Corea y el resto del mundo", ha asegurado durante una entrevista concedida a Europa Press.
Su importancia en este documental es vital, puesto que, tal y como ha señalado Longoria, gracias a él pudo entrar en el país y moverse con más "tranquilidad y flexibilidad de lo habitual", aunque nunca pudo encontrar la verdad de lo que ocurre realmente, algo que el director y productor cree que "no conocen ni los líderes".
Cao de Benós, nacido en Tarragona en 1974, siente fascinación por el régimen norcoreano y defiende sin condiciones la propaganda interna interna del país, con la que se proyecta el "ideal" que se quiere crear. "Intentamos transmitir una idea a través de unos dibujos animados. Uno necesita propaganda y marketing para transmitir su concepto de la población", ha indicado.
En cuanto al hermetismo, Cao de Benós ha afirmado que Corea del Norte se encuentra en guerra con Estados Unidos desde los años 50 y ha asegurado que a día de hoy en país norteamericano "se ha negado a firmar la paz". En este sentido, argumenta que "tarde o temprano" ocurrirá lo que se ha visto en otros países, por lo que se han de prepara para la "defensa del país". Por ello, y debido a las "bases militares camufladas" que describe, un extranjero solitario puede crear "malentendidos" y ser confundido con un "espía", según ha justificado.