MADRID, 24 Jun. (EUROPA PRESS) -
El miércoles 3 de julio llega a los cines ‘El bus de la vida’, la nueva película escrita y dirigida por Ibon Cormenzana ('La cima', 'Alegría Tristeza'). La cinta sigue a un profesor de música al que le diagnostican cáncer de oído interpretado por Dani Rovira. Un papel que tiene una gran carga personal para el actor, a quien detectaron un linfoma de Hodgkin en 2020 y que ha confesado que tuvo sus dudas antes de aceptar revivir en este personaje ciertos aspectos su lucha contra la enfermedad en la pantalla.
"Esta película me ha servido en parte de terapia", señala el cómico y monologuista en una entrevista concedida a Europa Press en la que también confiesa que dudó antes de aceptar el papel. "Dudé por varias cosas. Una, porque digo, ‘¿por qué yo y no otro actor que puede hacerlo mejor?’ Otra, no sé si estoy emocionalmente preparado para ahondar en un tema así, no sé, ha pasado poco tiempo", reflexiona.
"Luego había una parte que es la que menos igual me dio al final porque es la parte que proyectas hacia fuera, es decir, ‘ahora la gente va a pensar que como tuve esto ha venido un productor...’", reconoce Rovira, que temía que la gente "pudiera mercantilizar esta decisión". "Pero si no lo hago yo lo hará otro y en algún momento tendré que hacer una 'peli' sobre esto y como yo no sé cuántos años voy a vivir pues la primera que me llegó fue tan guay que dije pues ya está", explica.
El intérprete, que siempre se ha mostrado dispuesto a hablar de su enfermedad y remarcado la importancia de la visibilidad, espera que ‘El bus de la vida’ pueda "aportar algo más" o "ayudar a alguien con su aceptación". "Estamos muy felices de que esto sea una realidad", celebra Rovira.
El cómico apunta que tanto el personaje como la película estaban muy bien escritos y si algo aportó él fueron "detalles, matices". "Sí que es verdad que yo soy una persona de muchas propuestas. Recuerdo que estábamos en una lectura de guion y en la parte del diagnóstico, en el guion estaba escrito de una manera y yo le dije [a Cormenzana], ‘Mira yo tengo un audio grabado de cuando me hicieron mi diagnóstico’", relata el actor, recordando cómo en esos 15 minutos de audio, tres médicos con mascarilla, ya que era el inicio de la pandemia, le daban las malas noticias.
"Y dije: ‘Yo no tengo la verdad, pero esta fue mi verdad’. En mi caso, yo me quedaba casi mudo", explica, rememorando la escena, cómo la vivió y cómo la trasladó luego a la ficción. Así, el actor recomendó para dicho momento un "plano contraplano y una cosa como más sobria". "Porque este es un momento en que un edificio se le cae a una persona encima", asegura.
UNA PELÍCULA ‘FEEL GOOD’
A pesar de tratar un tema tan doloroso como el cáncer, ‘El bus de la vida’ estaría englobada dentro del subgénero ‘feel good’ (sentirse bien). Como señala el director: "Dentro de las posibilidades es la mejor que se podía dar, dentro de que trata un tema complejo sí que le quería dar toda la vitalidad y el optimismo".
Por su parte, Rovira defiende que a él, las etiquetas cada vez le gustan menos. "Está guay, es ‘feel good’ pero es como si te enseño mi vida y te digo qué género es, a lo largo de un día puede haber terror, puede haber comedia, musical y a lo mejor puede que un día haya porno", bromea. El actor apunta que, aunque se pueda clasificar en dicha categoría, la cinta es muchas más cosas: "Hay comedia, hay drama, hay trascendencia, hay música..."
Y es que ‘El bus de la vida’ camina haciendo equilibrios por una delgada línea para "que no pareciera que fuera una comedia, pero tampoco queríamos irnos al drama". Para intentarlo, el director usó tres elementos clave: "el humor, el compañerismo con gente con la que socializamos y la música". "El humor en esta película concretamente sirve para liberar y para ser capaz de socializar y normalizar un tema que a nadie nos gusta", señala.
Rovira, cómico y monologuista, defiende firmemente el humor. "Si no, sería irrespirable este mundo, sin humor, ya no te digo en un autobús donde llevan enfermos de cáncer a darse la quimio todas las semanas, en cualquier contexto, es que la risa es algo atávico, ancestral, no sé cuándo fue la primera risa, pero es que para mí es absolutamente necesario. Si no, te ahogas", explica.
"Parece increíble que, a día de hoy, a 2024 se tenga que estar reivindicando no la importancia, sino la vitalidad... es que es de vital importancia la risa, el humor, la comedia, el no caminar siempre por la línea de puntos en cuanto a pensamiento se refiere", reflexiona el actor. Susana Abaitua, que protagoniza el filme junto a Rovira, coincide con él, alabando "el descontrol de un ataque de risa".
UN VIAJE QUE NO SE HACE SOLO
Abaitua interpreta en la ficción a Mai, una mujer alegre y empática que conduce un viejo autocar, llevando gratuitamente a todos los pacientes de la zona al hospital donde reciben las sesiones de quimioterapia. Es en esos viajes donde se crea el clima de compañerismo al que se refería Cormenzana y que la actriz considera que acaba ayudando a todos los personajes, "ya sea respetando un silencio porque no quieres hablar, ya sea dando conversación porque la persona quiere hablar".
La intérprete, que ha expresado en numerosas ocasiones su gusto por viajar y, en particular, por viajar sola, no podría encarnar a un personaje más acompañado. "Lo de viajar sola es un poco un engaño, en realidad cuando viajas sola acabas siempre rodeada de gente, conoces a muchísima gente, es un poco más parecido a esto [la película]", aclara.
"Me gustaría que la gente después de verla, si tiene cosas por hacer, que no haya hecho y sin que esté enfermo le entraran ganas de querer hacerlas, de cantar, escribir un libro, hacer una película, subir una montaña... Cualquier cosa que esté en tu cabecita que quieres hacer pero no te has atrevido nunca", termina expresando Cormenzana. "Tenemos que aprovechar nuestra vida mientras estemos y disfrutarla: reír, llorar, cantar, gritar... y vivir", declara.
Rodada en Orduña (Bizkaia), la película parte de un guion de Cormenzana y Eduard Solà y cuenta con canciones originales de Manuela Vellés, además de temas de artistas como Kase O, Los Chikos del Maíz, Fito y Fitipaldis o Rigoberta Bandini y otros grupos de la esfera musical nacional. Junto a Rovira y Abaitua completan el reparto de la ficción Elena Irureta, Antonio Durán "Morris", Nagore Aramburu, Amancay Gaztañaga y Andrés Gertrúdix, y los debutantes Pablo Scapigliati, Julen Castillo y Miriam Rubio, con la colaboración especial de Roberto Álamo e Iria del Río.