MADRID, 7 Ene. (EDIZIONES) -
El actor estadounidense, que participó en Wonder Wheel, dijo el viernes que se arrepiente profundamente de haber trabajado con Woody Allen. Además, aseguró que esta experiencia ha sido una de las más desgarradoras en su carrera.
"Estoy profundamente arrepentido de trabajar con Woody Allen en Wonder Wheel", expresó Krumholtz en Twitter. "No podemos permitir que estos hombres nos representen en el mundo del entretenimiento, la política o cualquier otro ámbito. Están por debajo de hombres reales", continuó.
Ante las confesiones del intérprete un usuario le acusó de hipócrita al haber trabajado con el director conociendo su pasado. "No tienes credibilidad", le espetó. La riña no quedó ahí, Krumholtz decidió responder visiblemente cabreado tildando de "troll de Internet" al usuario que le escribió.
En medio de la discusión otro internauta le preguntó cómo podía afirmar que no conocía nada acerca de las acusaciones de carácter sexual. "Me quedó claro que las víctimas no tenían absolutamente ninguna razón para mentir y fue entonces cuando comencé a arrepentirme de mi decisión", contestó.
Más tarde agregó que el director "fue un gran cineasta" pero también "un lascivo". A continuación el artista se sinceró sobre su decisión de participar en el proyecto. "Acepté el trabajo porque era un sueño hecho realidad, pero supe de lo que se le acusaba y eso debería haberme detenido", afirmó.
En 1992 Dylan Farrow, hija adoptiva de Woody Allen, le acusó de asalto sexual. Sin embargo, el realizador nunca fue condenado por dicha denuncia, de la que dijo fue una invención de Mia Farrow, madre de Dylan. Sin ir más lejos, Mia llamó la atención, en una columna de opinión en Los Ángeles Times, a Kate Winslet, Blake Lively y Greta Gerwing por trabajar con Allen en medio de tales acusaciones.