MADRID, 26 Mar. (EUROPA PRESS) -
Amigos y familiares rindieron un sentido tributo a Carrie Fisher y Debbie Reynolds el pasado sábado. El Forest Lawn Memorial Park acogió los actos de esta despedida, que desde horas antes reunió a cientos de seguidores y allegados haciendo cola a las puertas del Hall of Liberty y cuya organización corrió a cargo de Todd Fisher, hermano e hijo de las famosas actrices.
"A mi madre no le gustaban los funerales ni los monumentos", confesó Todd Fisher. "A ella le gustaban los espectáculos". En su recuerdo, por tanto, se llevó a cabo un homenaje a modo de gala que abarcó décadas de la historia de Hollywood, incluyendo una versión coral de 'Singin 'in the Rain', la aparición del droide R2D2 y varias fotografías del archivo familiar.
"A mi madre le gustaban los shows y las fiestas, así que este espectáculo fue realmente diseñado para que vosotros estéis como en nuestra sala de estar, como si fuéramos una gran familia celebrando a dos mujeres increíbles", explicó Todd Fisher ante los cerca de 1.200 asistentes que portaban brazaletes con mensajes como: "Debbie y Carrie, para siempre en nuestros corazones" y "No temas a la muerte, ten miedo de una vida no vivida".
El escritor Gavin de Becker, amigo cercano a la familia, comentó en declaraciones a Variety que "la vida de Carrie Fisher fue un paseo con grandes personas; sus fiestas eran legendarias". Además, quiso recordar la poderosa vitalidad y el ferviente sentir feminista que rigió la vida de la actriz que interpretase a Leia en Star Wars, convirtiéndola en un símbolo del empoderamiento de la mujer.
Por otra parte, y entre otras muchas cualidades, los amigos de Debbie Reynolds destacaron su pasión por la danza y, en especial, su continuo apoyo a diferentes organizaciones benéficas. Reynolds fue un referente en cuanto a la ayuda y apoyo a los veteranos que regresaron con secuelas mentales de la guerra.