MADRID, 11 Feb. (EDIZIONES) -
El remake de Scarface es un proyecto que lleva tiempo en el candelero. A la espera de director, el guion ya ha pasado por las manos de Terence Winter (Boardwalk Empire) y, anteriormente, Jonathan Herman (Straight Outta Compton). Por si fuera poco, Universal Pictures ha anunciado ahora que Joel y Ethan Coen están puliendo el texto para reimaginar, de una vez por todas, la mítica cinta de Brian De Palma (1983).
La nueva trama ofrece un giro notable con respecto a la historia original. En lugar de un inmigrante cubano que trepa en el escalafón de la mafia de Miami -el mítico Tony Montana de Al Pacino-, será un inmigrante mexicano (Diego Luna) quien esté dispuesto a todo para triunfar en el mundo del crimen de Los Ángeles.
Con Antoine Fuqua fuera de juego, Universal sigue tanteando las opciones en torno a quién dirigirá el remake. Según The Hollywood Reporter, los principales candidatos para dicho puesto actualmente son David MacKenzie (Comanchería) y Peter Berg (Día de patriotas). La nueva Scarface llegará a los cines en agosto de 2018.
CON TODO EL APOYO
A pesar de los continuos retrasos y las dificultades, el proyecto cuenta con un gran respaldo. Incluso el propio Al Pacino hizo gala hace unos meses de su alegría y no dudó en señalar como algo natural la creciente moda de llevar a cabo este remake: "Es parte de lo que hacemos. Nosotros rehacemos cosas".
No es de extrañar que el actor neoyorquino apoye dicha aventura cinematográfica y su formato, ya que la cinta de los 80 que él mismo protagonizó ya fue a su vez una actualización del filme dirigido por Howard Hawks y Richard Rosson en 1932.