Ingrid Rubio y Najwa Nimri son dos hermanas enfrentadas en la película 'Trastorno'

MADRID, 16 Nov. (EUROPA PRESS) -

Ingrid Rubio y Najwa Nimri dan vida a dos hermanas enfrentadas en el 'thriller' 'Trastorno', de Fernando Cámara ('Memorias del ángel caído'), que se estrena en los cines mañana. Como explicó hoy su director, esta cinta de "terror y suspense" es "pieza de imitación" de otras como 'Mujer blanca soltera busca', 'Atracción fatal' o 'La mano que mece la cuna' donde, al igual que en el clásico 'Extraños en un tren', de Hitchcock, "el enemigo se instala en casa".

El director, junto a las dos protagonistas y el actor Juan Sanz, presentó hoy en Madrid su segunda película, un encargo que Cámara ha hecho a imagen y semejanza de cintas como 'Repulsión', de Roman Polanski, o 'Cría cuervos', de Carlos Saura (con un guiño a ésta al incluir el tema '¿Por qué te vas?' interpretado por Jeanette), según explicó. "Soy consciente de que he imitado y asumo esos referentes del 'thriller' en el que alguien se te instala en casa y te busca las cosquillas", afirmó.

En este caso la "mala" de la película es Ingrid Rubio, que encarna a Elena, una joven atractiva y desenfadada que decide pasar un fin de semana en casa de su hermana Natalia (Nimri), que se encuentra en el mejor momento de su vida y está embarazada de cinco meses. Tras un primer contacto satisfactorio la situación cambia cuando Elena empieza a mostrar su lado oscuro.

"'Trastorno' es la historia del trágico reencuentro de dos hermanas muy unidas en la infancia; una historia de celos, sobre la maternidad y la sangre", dijo Cámara, que rodó su película en una sola localización, una casa de 3.000 metros cuadrados, en la que estuvo encerrado todo el equipo y que lleva al espectador "al límite de la claustrofobia", a través de una "trama de suspense y terror pasada por un baño de sangre".

"ANGUSTIA Y MAL ROLLO"

Nimri, que en esta ocasión es "la buena", reconoció que no está "acostumbrada a hacer papeles lineales, sin problemas psicológicos". "Prefiero hacer de mala, porque de pasiva te llevas todas", destacó, subrayando que la "angustia y el mal rollo" se trasladó al rodaje, una "gran hermano" que llevó "muy mal". "Estuve todo el rodaje vomitando y cogí anemia", recordó la actriz, que tuvo que trabajar pegada a una "barriga de látex".

Rubio, que lleva "toda la carga emocional" de la película, afirmó que le gustó hacer de mala en su primer filme de género. "Ha sido un trabajo intenso y arriesgado", concluyó.